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El presidente del Congreso local, Eduardo Ramírez Aguilar, y otro diputado fueron retenidos por indígenas tzotziles y trasladados a Chenalhó para pedir que la alcaldesa de ese lugar, Rosa Pérez Pérez, deje el cargo.
Cerca de las 15:30 horas de ayer, Ramírez Aguilar y el diputado Carlos Arturo Penagos llegaron a la curia diocesana para dialogar con el vicario de Paz y Justicia, Gonzalo Ituarte Verduzco. En ese momento llegaron al lugar indígenas, algunos que se cubrían los rostros con pasamontañas, para sacarlos del recinto y obligarlos a subir a una camioneta Nissan.
Un indígena armado con un palo obligó a Penagos a subir a la camioneta donde se encontraban varios hombres y mujeres.
El presidente del Congreso, por su parte, fue bajado del vehículo y sometido por varios indígenas para luego subirlo a otra unidad que se dirigió hacia el municipio de Chenalhó, a 48 kilómetros de distancia del sitio.
El chofer de Ramírez Aguilar, Jorge Calvo, también fue sometido por los inconformes: las diputadas Fabiola Ricci Diestel, del PAN; Judith Torres Vera, del PRI; Patricia Conde, del PVEM; y Fernando Bermúdez, secretario particular del presidente del Congreso, consiguieron burlar a los indígenas para no ser capturados.
Las negociaciones. Antes de las 17:00 horas, los dos diputados llegaron a Chenalhó e iniciaron el diálogo con el fin de conseguir la renuncia de la edil Rosa Pérez Pérez.
Los indígenas obligaron a Ramírez Aguilar a que vistiera una blusa de las mujeres del lugar, al parecer porque la guayabera de color blanco que portaba se rompió entre los jaloneos.
En el centro de la cabecera municipal de Chenalhó miles de indígenas arribaron para presenciar las negociaciones de los legisladores.
Desde principios de abril, indígenas del PRI han pedido la renuncia de Rosa Pérez Pérez para nombrar al síndico Miguel Santíz en su lugar.
Desde entonces, los indígenas opositores a la alcaldesa han realizado movilizaciones para lograr su remoción del cargo. Después del 26 de abril se instaló una mesa de negociaciones con la mediación de la Diócesis de San Cristóbal.
Hasta ayer por la noche aún no habían sido liberados, mientras el Congreso del estado informó que el diputado Ramírez Aguilar se encuentra en “buen estado de salud” y aseguró que “fue trasladado a Chenalhó a bordo de pequeñas camionetas hasta la cabecera municipal”.
El gobierno de Chiapas, en un comunicado, rechazó “de manera contundente” las acciones de habitantes de Chenalhó contra los diputados.
