estados@eluniversal.com.mx
En el primer día de excavaciones en la fosa común de Tetelcingo, donde se estima exhumar 116 restos mortales, fue encontrado una bolsa cuyo contenido supone el depósito de un cuerpo humano el cual será extraído hasta este martes.
El logró fue alcanzado después de cuatro horas de trabajo, aunque el equipo de científico de la UAEM atribuyó la lentitud a que las autoridades equivocaron la ubicación correcta del sitio donde se encuentran sepultados los cadáveres desde marzo de 2014.
El primer cuerpo fue localizado a una profundidad de 3.25 metros, en tanto que el parte de la Fiscalía General del Estado precisa que los primeros cuerpos estaban sepultados a una distancia de dos metros, pero después modificaron la versión a 2.5 metros.
La fosa, conforme al informe oficial, mide tres metros por seis de largo y cinco de profundidad, cuyo sitio fue acordonado hasta noviembre de 2015, luego de que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) recomendó perimetrar el sitio.
El integrante de la Comisión Científica de Identificación Humana de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Abimelec Morales Quiroz, dijo que el sitio señalado es impreciso, incluso estimó que en realidad son dos fosas, una en línea horizontal y otra vertical, ambas forman una letra L.
La diligencia inició con más de seis horas de retraso debido al acordonamiento oficial que provocó confusión, además de que el grupo de especialistas de la UAEM y los familiares de víctimas se opusieron inicialmente al uso de un trascabo con “mano de chango” para extraer las bolsas con los cuerpos.
Entonces, los inconformes demandaron la presencia del fiscal general Javier Pérez Durón, quien arribó al mediodía y luego de 30 minutos dio la primera palada junto con la madre y tía de Oliver Wenceslao, víctima de homicidio y uno de los inhumados irregularmente por la fiscalía.
La diligencia continuó a punta de pico y pala y por espacio de dos horas, cinco sepultureros sólo pudieron avanzar un metro, por lo que fue necesaria la ayuda del trascabo. La máquina cavó dos metros, luego 2.30, 2.50 hasta alcanzar los tres metros de profundidad.
Entonces “la mano de chango” excavó a un costado de la zona acordonada y a los 3.26 metros dio con la primera bolsa de los cuerpos.
Abimelec Morales, jefe del equipo técnico pericial de la UAEM, explicó entonces la falla en la ubicación.
“Son dos fosas, una en posición horizontal y vertical, siendo ésta la que abrieron y presumiblemente los cuerpos corresponden a los cuerpos inhumados de la región oriente, la otra fosa contendrá los de la región metropolitana”, detalló Abimelec Morales.
Lamentó que ni las propias autoridades tengan la certeza del lugar donde ellas mismas inhumaron, exhumaron y re-inhumaron más de 100 cuerpos, desde 2014.
Llegamos a pensar que los cuerpos simplemente ya no estaban, expresó.
Alrededor de las 17:00 horas se encontró la primera bolsa y entonces fueron detenidos los trabajos ya que, explicó el experto forense, la fiscalía estatal ordenó una labor de 6:00 a 18:00 horas.