Un grupo de geólogos de la Secretaría de Protección Civil y técnicos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) se trasladaron a la zona donde se originó una grieta que se “comió” las aguas del río Atoyac, en la zona montañosa central de Veracruz.
Se trata de un geólogo de la Secretaría de Protección Civil estatal y al menos de tres de la dependencia federal que llevarán a cabo una revisión de la grieta para determinar lo que causó este fenómeno geológico, además de sus posibles efectos.
El Director General de Atención a Emergencias de Protección Civil, Ricardo Maza, informó que se encuentran en comunicación con expertos del Centro Nacional de Prevención de Desastres que conocen la situación y han ofrecido apoyo con personal técnico especialista, así como equipo de investigación en caso de requerirse.
Ante la sorpresa de pobladores y de las propias autoridades, en menos de 48 horas “desapareció” el río Atoyac, el cual nace en la zona montañosa central de Veracruz y desemboca a un segundo afluente cerca del Golfo de México.
Un enorme socavón sobre el lecho del río, provocó que miles de litros de agua se fueran al subsuelo y secaran la cuenca que atraviesa ocho municipios y abastece a más de diez mil familias.
La desaparición del Río Atoyac, que náhuatl significa Agua que se derrama, ha generado zozobra entre los habitantes de comunidades rurales y una gran preocupación de autoridades municipales de la zona.
El nacimiento del afluente en el municipio de Amatlán de los Reyes sigue intacto y se mantiene la fluidez del agua, pero unos tres kilómetros abajo se topa con la grieta de aproximadamente 30 metros de largo y 20 de ancho.
El funcionario detalló que en una primera supervisión se detectó que la fractura no está cerca de ninguna comunidad, así que no hay registro de afectaciones directas a la población.
La Dirección Técnica de la CONAGUA destacó que se mantiene comunicación entre el Gerente del Ingenio El Potrero, autoridades de la Unidad de Riego Alfredo V. Bonfil, quienes coinciden en que el sitio donde existe el socavón presenta resumideros que datan de años atrás.
“Estamos en una zona de fallas geológicas, de rocas calizas; el propio Ingenio construyó desde hace 50 años una represa y un canal de desvío para evitar que el agua pase por esa área de fallas”.
Reiteró que la factoría El Potrero y la Unidad de Riego no tienen problema con el agua, pues los socavones están por una margen del río.
La grieta tiene una longitud de aproximadamente 30 metros de largo y de 17 a 20 de ancho, misma que atraviesa el río Atoyac y ocasiona que se sigan afectando los terrenos, porque continúan las fisuras.
afcl