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Uno de los 29 maestros dados de baja en Quintana Roo por la Secretaría de Educación, al no haber presentado la evaluación magisterial, impartió clases en plena banqueta a una veintena de alumnos de la primaria “Víctor Hugo Bolaños”, localizada en el fraccionamiento “Héroes”, en la ciudad de Cancún.
Padres de familia de las y los alumnos, quienes exigen la reinstalación del profesor Julio César Tzeek Suárez, montaron mesas y sillas en la banqueta, afuera del plantel, para que sus hijos tomaran la clase en plena vía pública, sin obstaculizar el tránsito de las personas.
Los infantes del segundo grado de primaria no quieren que su maestro se vaya. Sus padres tampoco, por eso le pidieron dar clases en la calle y, a través de pancartas, lo deslindaron de cualquier responsabilidad, aclarando que no fue él quien les incitó a tomar clases afuera de las instalaciones.
“Es nuestra la responsabilidad y decisión y solicitud, asumimos la responsabilidad y exigimos la restitución del maestro en su trabajo”, se leía en una de las pancartas, firmadas por los padres de familia.
Sin embargo, autoridades de la escuela llamaron a la fuerza pública para mover del lugar al docente, quien se negó a ser evaluado meses atrás por las irregularidades presentadas en la notificación para presentar los exámenes.
En entrevista, Tzeek explicó que adherirse al nuevo sistema planteado por el gobierno federal, luego de la Reforma Educativa aprobada durante el presente sexenio, implicaría la pérdida total de sus derechos laborales –entre ellos su antigüedad- por lo que buscará defenderse legalmente, junto con otros profesores.
Para no tensar más la situación, Tzeek Suárez habló con los padres de familia y les explicó a sus alumnos que suspendería las lecciones que iniciaron a las 7.30 horas de hoy y culminaron dos horas después.
En el interior del plantel, el nuevo profesor que lo sustituye –Luis Ángel- enfrentó un salón prácticamente vacío, si no hubiese sido por la presencia de un alumno que sí entró a su clase.
La jefa de sector, adscrita a la Secretaría de Educación y Cultura de Quintana Roo (SEyC), María Teresa Canul, indicó que durante el verano se dará una nueva oportunidad a Tzeek para presentar la evaluación, lo que posibilitaría su reincorporación como docente, aunque no necesariamente a esa escuela.
Policías de Cancún fotografían a menores de edad
Lucy, madre de una de las pequeñas alumnas de Tzeek, reiteró que el profesor cuenta con todo el respaldo de los padres de familia y criticó que de un día a otro, sin notificarles a ellos o a los niños, el docente fuese removido del grupo.
Reprochó la presencia de elementos de Seguridad Pública de Cancún para hostigar al maestro, quien impartió sus clases en la banqueta –sin entorpecer el tránsito por la vía pública- dijo.
“Nosotros como padres de familia decidimos que nuestros hijos entran a la escuela, si entra el profesor, si no, no. Canul nos vino a decir que no se podía hacer nada, que había que respetar la Ley y nos dijo la señora que somos borregos. El maestro no tiene nada que ver en esto.
“Nos dijeron que al maestro le van a dar una oportunidad para que presente el examen, pero que no se sabe si en junio o antes, pero que mientras el profesor no tiene nada que venir a hacer aquí a la escuela, que no puede acercarse. También están siendo muy groseros con nosotros, padres de familia. Nos niegan la entrada”, denunció.
La madre de familia agregó que los agentes de Seguridad Pública les tomaron fotos a ellos y también a sus hijos, así como a las placas de sus automóviles.
Nacido en Campeche, Tzeek Suárez llegó a Cancún a dar clases hace 18 años. Hace 8 que labora para la escuela “Víctor Hugo Bolaños”.
Se negó a ser evaluado ante la certeza de que la pretendida Reforma Educativa, realmente es una Reforma Laboral que despoja a los docentes de sus derechos como trabajadores, sin revisar realmente su desempeño como maestros, ni los planes de estudio o contenidos a impartir.
“La Reforma Educativa sólo evaluando al maestro no es congruente; quién evalúa los planes y programas, a las autoridades educativas, a los líderes sindicales, que ganan muchísimo más que nosotros, que estamos pendientes de los niños.
“Yo he pugnado porque la Reforma consista en que las autoridades vengan al salón, mi supervisor, mi director y los padres de familia, y pasen a ver cómo hago mi trabajo, no que nos evalúen conforme a un examen que sabemos bien que es manipulado. Por eso no presenté el examen, porque no creo, no confío”, expresó.
Tzeek detalló que los planes y programas están desfasados de la realidad y que los libros de texto de Educación Básica presentan errores de ortografía y contenidos deficientes.
“Eso nos da a entender que la Reforma Educativa trata de formar ciudadanos ignorantes, que sepan menos de sus derechos para defenderse luego”, manifestó.
Para el profesor con esta nueva Ley, se les expone a perder su antigüedad y su oportunidad de crear derechos laborales.
Manifestó que para evaluarles, tampoco les notificaron en tiempo, ya que la Ley marca que debieron ser avisados con tres meses de antelación y a él le notificaron dos días antes, por correo electrónico.
Con lo ocurrido, la SEyC le ofreció presentar en mayo un examen de oposición, para concursar por una nueva plaza, como maestro de nuevo ingreso, lo que confirma que perderá sus 18 años de antigüedad y los derechos asociados a ella.
“No vamos a aceptar eso y llegaremos hasta las últimas consecuencias; le apuestan a cansarnos, pero la razón y la justicia nos asisten; con ayuda de los alumnos y de los padres, podremos lograrlo. Llamamos a los compañeros que se pongan las pilas, porque si nos unimos como lo hicimos cuando marchamos mas de 25 mil maestros de todo el estado, yo creo que podemos echar atrás la Reforma Educativa. Es un poquito de convicción lo que hace falta al Magisterio”, concluyó.
spb
