El diputado local perredista, Sebastián de la Rosa Peláez, renunció a la coordinación de la fracción parlamentaria del PRD en el Congreso local guerrerense, bajo el argumento de que un grupo de diputados de su partido, solo se dedican a “defender sus intereses personales por encima de cualquier compromiso social”.
El ahora ex coordinador de la fracción parlamentaria del PRD, solo duró en ese cargo seis meses, y finalmente tras fuertes roces y diferencias con la mayoría de los 14 legisladores y legisladoras guerrerenses en la LXI Legislatura local, en la sesión del martes de esta semana, dio a conocer que renunciaba a la coordinación legislativa del PRD.
El diputado local, subió a la tribuna en la sesión de ese día, solo para dar a conocer que no podía seguir coordinando una fracción parlamentaria de su partido en la que algunos de sus compañeros de bancada legislativa “se han rendido a la práctica perniciosa del uso patrimonialista del poder y abuso de autoridad”.
En esa sesión a la que solo acudieron tres de los 14 diputados locales del PRD, Sebastián de la Rosa Peláez, dio a conocer que su renuncia obedecía a que sus compañeros y compañeras de curul, cada vez que se iba a votar alguna iniciativa de ley importante para el gobierno, le pedían negociar algunas prebendas a cambio de su voto a favor.
Hoy en conferencia de prensa en el puerto de Acapulco, Sebastián de la Rosa Peláez, ratificó su renuncia a la coordinación de la fracción parlamentaria del PRD en la LXI Legislatura local, “porque no puedo seguir coordinando una fracción en un Congreso, donde un grupo de diputados y diputadas han decidido servirse de su autoridad para beneficio personal”.
Indicó que ese grupo de diputados locales perredistas, se alejaron de los estatutos del PRD, en los que se tiene como objetivos centrales el combate a la corrupción y la opacidad de los funcionarios públicos, pero se olvidaron que son legisladores de izquierda, “y han asumido un asunto personal y no de la función pública que representamos”.
Pidió a la dirigencia nacional y estatal de su partido, a que vigilen a ese grupo de legisladores y legisladoras, para que tras una investigación se les sancione conforme a los estatutos del PRD, si se comprueba que su actuación no va de acuerdo a la ideología de izquierda de ese partido político.