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El Juzgado Segundo de Distrito, radicado en Cancún, concedió la suspensión definitiva de remoción de vegetación y actividades de construcción en “Malecón Tajamar”, por actos nuevos y omisiones por parte del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
El acuerdo se publicó este martes en estrados y tiene origen en la ampliación de la demanda de amparo que fue interpuesta por abogados, luego de haber obtenido –el 2 de febrero pasado- de ese mismo Juzgado, una primer suspensión definitiva respecto al expediente 86/2016.
De raíz, una ciudadana promovió una demanda de amparo que fue admitida por el Juzgado Segundo, el 19 de enero pasado.
Al día siguiente el juez concedió la suspensión provisional de obras y actividades y se instruyó a realizar una inspección ocular, el 21 de ese mes, la cual estuvo a cargo de actuarios.
La diligencia fue atestiguada por abogados de la ciudadanía y activistas en defensa de los manglares y animales que sobrevivieron a la devastación del polígono de 78.4 hectáreas, los días 16 y 17 de enero, ordenada por el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
En entrevista con EL UNIVERSAL, la abogada Isabel González Glennie, explicó que durante ese recorrido ubicaron animales vivos y documentaron que el desmonte de los lotes privados fue parejo, sin atender las superficies diferenciadas de acuerdo con la zonificación y parámetros urbanos del Plan Parcial de Desarrollo Urbano de Malecón Cancún, que las autorizaciones de Impacto Ambiental y de Cambio de Uso de Suelo Forestal, expedidas por la Semarnat, el 28 de julio de 2005 y febrero del 2006, ordenaban respetar.
“También nos dimos cuenta que los elementos de Seguridad Pública y la maquinaria en Malecón Tajamar, presentes los días 16 y 17 de enero, ya no estaban ahí y ese era uno de los actos reclamados, pero atestiguamos que había animales vivos, lo cual representa una violación a la condicionante 2 del Resolutivo de Semarnat a Fonatur que establece que debieron hacer el rescate de fauna silvestre antes, no después, de los desmontes de terreno.
“Tampoco hubo un desmonte diferenciado de la vegetación de los predios, se tocó el manglar, lo cual no podían de acuerdo con lo establecido en el Cambio de Uso de Suelo en Terrenos Forestales, que constituye otra violación a las autorizaciones federales y fue que decidimos ampliar la demanda de amparo, por actos nuevos y omisiones”, ahondó.
En ese ínter, el dos de febrero, el Juzgado Segundo concedió una primer suspensión definitiva, cuyos efectos consisten en que “las cosas se mantengan en el estado que actualmente guardan, esto es, que se suspenda cualquier acto que implique la ejecución de remoción de cualquier tipo de vegetación, así como el relleno con material pétreo” y, que no se realicen actividades vinculadas a obras civiles en Malecón Tajamar, hasta que se dicte sentencia respecto a la demanda de amparo.
Días después se promovió la ampliación de la demanda original, ya con los actos nuevos y omisiones, por parte del Fonatur, la Semarnat y la Profepa; el primero, por no cumplir con las condicionantes del Resolutivo de la Secretaría; contra ésta, por no haber declarado la nulidad de ese resolutivo y de la autorización de cambio de uso de suelo en terrenos forestales, ante los incumplimientos, expuso la litigante.
La Profepa incurrió en presuntas omisiones –dijo- al no ejercer sus facultades de supervisión del rescate de fauna silvestre la madrugada en que se dio la devastación de manglares; tampoco acudió a verificar la situación respecto a las denuncias que diversos ciudadanos hicieron a la delegación de la dependencia en Quintana Roo, desde el 16 de enero y en días subsecuentes.
El titular de la Procuraduría, Guillermo Haro Belchez, con 20 inspectores, se presentó 10 días después al lugar, cuando las condiciones ambientales ya eran otras y dos días después emitió un dictamen preliminar que negaba el ecocidio y la devastación en el polígono, rememoró González Glennie.
El viernes pasado, actuarios del Juzgado Segundo volvieron a “Malecón Tajamar”, para verificar los actos reclamados por el equipo de abogados y constataron la presencia de animales vivos, como cocodrilos, crías de cocodrilo, garcillas, iguanas y aves, así como el crecimiento de manglar.
“Con base en esta ampliación de la demanda de amparo y la inspección hecha por actuarios, es que se dictó esta nueva suspensión definitiva”, dijo la abogada.
Piden clausura y castigo a responsables
Por separado, activistas de “Guardianes del Manglar Tajamar” y el Grupo Vasconcelos, demandó la cancelación del proyecto “Malecón Tajamar”, la clausura inmediata del polígono y el castigo para funcionarios de Fonatur, Semarnat y Profepa, por actuaciones y omisiones diversas.
En conferencia de prensa, Katherine Ender de “Guardianes…” y Laura Uribe, del Grupo Vasconcelos, que Fonatur incumplió en un 99 por ciento los permisos que le fueron expedidos por la Semarnat; Profepa ha omitido actuar al respecto y la Secretaría no ha declarado la nulidad de sus autorizaciones.
También anunciaron que en noviembre próximo, cuando Cancún sea sede de la Conferencia de las Partes (COP 13), realizarán en “Malecón Tajamar”, una COP paralela, pero para demostrar al mundo “las mentiras” sobre la conservación de los recursos naturales aquí. “Será una cumbre de la devastación y los crímenes ambientales”, dijo Uribe.
Ender Córdova añadió que dado que los manglares de Tajamar forman parte un cinturón de humedales que fue fragmentado por el gobierno federal, a través del Fonatur, solicitarán a Ramsar, su incorporación a dicha convención internacional, como lo es Manglares de Nichupté.
afcl
