José Armenta, delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) en Guerrero, negó que se haya incumplido con el ofrecimiento de viviendas, como aseguró un grupo de familiares de jugadores del club Avispones de Chilpancingo, que murieron en Iguala el 26 de septiembre de 2014.
Indicó que la semana pasada se reunió con una comisión de padres de los afectados, a quienes informó que las casas ya están completamente construidas, pero aún están pendientes de ser entregadas debido a que no cuentan con los servicios de agua y luz.
“El ofrecimiento de viviendas fue un gesto solidario por parte del gobierno estatal con los afectados. Las casas ya están construidas, pero aun se están realizando la instalación de los servicios de luz y agua, aunque ya tienen gas”, dijo.
El funcionario afirmó que los encargados de la construcción de las 31 viviendas que estarán ubicadas en el fraccionamiento El Mirador en Chilpancingo, estiman que estarán listas para ser entregadas en no más de tres meses.
Asimismo rechazó que las casas que se están construyendo fueran para los damnificados del huracán Manuel, como afirmaron algunos de los familiares.
Al cuestionarle sobre la inconformidad de los padres de las víctimas, señaló que probablemente se deba a que algunos de los familiares preferían recibir el pago en efectivo.