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El periodista y dueño de la estación de radio XEVX en Tabasco, Moisés Dagdug Lutzow, fue encontrado muerto en su domicilio la mañana de ayer, por lo que la Fiscalía General del Estado (FGE) inició las investigaciones para dar con el o los responsables de este asesinato.
El empresario era considerado como uno de los locutores con voces más críticas en los últimos meses en temas sociales. El pasado viernes Dagdug Lutzow transmitió la última emisión de su programa De Frente a Tabasco —en radio y televisión digital— donde habló de linchamientos y la inseguridad.
De acuerdo con Ángel Antonio Jiménez, jefe de información del programa Poder Informativo de la barra estelar de la estación de radio, ayer por la mañana, en plena transmisión del noticiero, se les informó que el portón de la casa del periodista —la cual se encuentra enfrente del edificio radiofónico— había sido derribado.
Moisés Dagdug Lutzow vivía solo y había denunciado que recibió diversas amenazas. Fue diputado federal y, en el ámbito personal, era consuegro del ex gobernador de Tabasco Andrés Granier, ya que una de sus hijas estuvo casada con Fabián Granier Calles.
La hermana del periodista, la ex diputada local del PRI Esther Alicia Dagdug Lutzow, ingresó al domicilio y encontró el cadáver de Moisés tirado en la cocina.
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Tabasco informó que por el homicidio se inició una averiguación previa y se realiza un rastreo criminalístico en su domicilio, así como el aseguramiento y traslado de la camioneta robada.
Se dio a conocer que la unidad fue localizada en el kilómetro 13.7 de la carretera Villahermosa–Centla, en cuyo interior se encontraron evidencias que son motivo de análisis, como botellas de licor, lentes de aumento y un arma blanca ensangrentada, entre otros objetos.
El asesinato fue condenado por políticos y amigos del periodista; uno de ellos, el líder nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador, quien escribió en Twitter: “Me conmovió el asesinato de Moisés Dagdug. Lo lamento mucho y envío mi más sentido pésame a sus familiares y amigos”.
Quien también se solidarizó con la familia Dagdug Lutzow fue el gobernador de Chiapas, Manuel Velasco: “Lamento profundamente la muerte de mi amigo Moisés Dagdug Lutzow. Me uno al dolor que embarga a su familia y amistades. Descanse en paz”.
Durante su visita a Tabasco, el mandatario de Morelos, Graco Ramírez, dijo: “Lamento la pérdida de Moisés Dagdug, amigo mío también; una familia que conozco también como todos los tabasqueños; familia respetable, de trabajo”.
En riesgo. En lo que va del año han sido asesinados cuatro periodistas. Otro caso reciente es el de Anabel Flores Salazar en Veracruz, reportera del diario El Sol de Orizaba, quien fue secuestrada el 8 de febrero y un día después apareció su cadáver en la carretera Cuacnopalan-Oaxaca, en Puebla.
El 22 de enero Reinel Martínez Cerqueda, locutor de varios programas de la radio comunitaria El Manantial, fue asesinado a balazos en la ciudad de Santiago Laollaga, Oaxaca.
Un día antes, el reportero Marcos Hernández Bautista recibió un disparo en la cabeza cuando subía a su automóvil en San Andrés Huaxpaltepec, también en Oaxaca.
Cifras del organismo internacional Reporteros sin Fronteras indican que en la última década han sido asesinados 80 periodistas en México.
