El gobernador de Morelos, Graco Ramírez, dijo que el asesinato de la alcaldesa de Temixco, Gisela Mota, es un mensaje para que las autoridades municipales no acepten el esquema de coordinación de seguridad de Mando Único.
Señaló que el crimen ocurre en el marco de la transición de la instalación de las nuevas autoridades municipales, en donde la alcaldesa “había expresado públicamente su decisión de ratificar el Mando Único”.
Además, el gobierno estatal anunció que, conforme a sus facultades, asumirá la seguridad, a través del Mando Único, en 15 municipios.
"Con base en el Artículo 115, fracción 7 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, el gobierno morelense toma la seguridad de Cuernavaca, Temixco, Jojutla, Zacatepec, Emiliano Zapata, Ayala, Ocuituco, Xochitepec, Huitzilac, Jiutepec, Tlayacapan, Temoac, Jantetelco, Tepalcingo y Tlaquiltenango".
Señaló que junto con autoridades municipales y federales observó que el Mando Único es perfectible y de no hacerlo “terminaríamos en grave crisis de seguridad”.
Reiteró que en el Gobierno de Morelos “no daremos ni un paso atrás y no cederemos a amenazas de grupos de la delincuencia organizada”.
Finalmente, informó que hoy se realizó una reunión de trabajo con autoridades federales y estatales, del Grupo de Coordinación Morelos, con la participación del Subprocurador de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo de la PGR, Gilberto Higuera Bernal.
“Realizamos una evaluación de los hechos con información de inteligencia federal y estatal y hemos tomado decisiones para evitar una escalada de actos de mayor desafío en contra del orden constitucional y democrático”, puntualizó Graco Ramírez.