La Fiscalía General del Estado (FGE) detuvo a Marcos Conde Hernández, delegado de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) en Tierra Blanca, y a Otoniel Cruz Linares, policía de esa corporación, por su probable responsabilidad en la desaparición forzada de cinco jóvenes.
Los dos nuevos implicados se sumaron a cuatro policías estatales acusados de la “desaparición forzada”, quienes ya fueron consignados ante el Juez de Primera Instancia de Cosamaloapan.
El pasado 11 de enero cuatro hombres y una mujer de 16 años, quienes viajaban en un vehículo, desaparecieron luego de que un grupo de agentes estatales los interrogó.
Familiares y amigos de las víctimas intensificaron la búsqueda de los cinco a través de redes sociales, mientras, las autoridades mantienen un operativo especial con 140 personas para tratar de ubicarlos. Participan tres fiscales regionales y especializados, siete fiscales investigadores, 15 auxiliares de fiscales, 10 peritos y dos asesores, así como la Unidad de Análisis e Inteligencia.
Se estableció una estrategia de colaboración con elementos del Ejército Mexicano, la Marina-Armada, la Procuraduría General de la República, la Policía Federal y el Centro de Investigación y Seguridad Nacional.