Cuernavaca.— El fiscal morelense Javier Pérez Durón abrió la posibilidad de que los 103 cadáveres, presuntamente inhumados ilegalmente en una fosa común de Tetelcingo, sean exhumados para que junto con familiares de desaparecidos inicien un proceso de identificación de los cuerpos.
Entrevistado sobre los avances en las investigaciones contra servidores públicos que ordenaron la inhumación, Javier Pérez Durón informó que son cuatro funcionarios investigados, y anunció que en los próximos días habrá cambios en la estructura de la dependencia como lo propusieron los legisladores cuando lo nombraron Fiscal, el jueves de la semana pasada.
Precisó que de los 105 cadáveres sepultados, dos ya fueron entregados a sus familiares, y los 103 restantes no han sido identificadas por nombre, sólo por número de carpeta de investigación y huellas dactilares.
Peréz Durón mencionó que algunos de los cuerpos ya fueron identificados por medio del Sistema de Identificación Dactilar (Afis), base de datos que contiene a las personas con antecedentes criminales.
Sobre la legalidad de la fosa común, el fiscal dijo se trata de un “trámite administrativo con el ayuntamiento (de Cuautla) y la Secretaría de Salud”, pero personal de la Comisión de Derechos Humanos de Morelos afirmó el viernes que tras una investigación descubrieron que la fosa no cuenta con permisos de esta dependencias para funcionar como depósito de cadáveres desconocidos o no identificados.
La semana pasada la familia de Oliver, asesinado en el oriente del estado que depositado en la fosa de Tetelcingo por omisión de servidores públicos, a pesar de haber sido identificado en 2013, difundieron un video donde una máquina saca más de 100 cuerpos.