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Familias desalojadas de la sierra de Durango y habitantes de rancherías y poblados rurales de los municipios sinaloenses de Culiacán, Salvador Alvarado y Navolato protestaron contra los operativos que implementa la Secretaría de Marina en busca de Joaquín Guzmán Loera, "El Chapo" Guzmán.
Los inconformes, quienes acusan abusos y atropellos por parte de las fuerzas federales durante los operativos, se apostaron en la explanada de Palacio de Gobierno, donde mostraron diversas pancartas.
Posteriormente, se trasladaron al campamento de los marinos, ubicado de manera provisional en el Parque Culiacán 87, e intentaron dialogar con los mandos, aunque no lo lograron.
Debido a su presencia en el campamento de las fuerzas armadas, unidades artilladas tendieron un cerco de seguridad como medida preventiva.
A bordo de camiones rentados, cerca de 100 familias que huyeron desde la semana pasada de rancherías enclavadas en la sierra de Tamazula, Durango, se unieron a cerca de 400 personas más, en su mayoría mujeres y niños, procedentes de tres municipios de Sinaloa.
Algunos manifestantes intentaron penetrar a Palacio de Gobierno, por lo que el personal de seguridad forcejeó con ellos ocasionando que uno de los cristales de una de las puertas de acceso se rompiera en su parte baja.
Durante una reunión, el secretario General de Gobierno, Gerardo Vargas Landeros, ofreció ser el conducto ante las fuerzas federales para que en sus acciones se respeten sus derechos y actúen de acuerdo al marco legal.
Les comentó que la Marina permanecerá con sus acciones en ambas entidades federativas, por lo que estableció que las familias desalojadas que se encuentran en Cosalá continuarán recibiendo toda clase de ayuda, tanto en alimentos y ropa, como en medicamentos.
spb
