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San Luis Potosí.— En su toma de protesta, el gobernador Juan Manuel Carreras López ofreció un gobierno honesto, sin complicidades, pactos o compromisos por encima de la ley, en el que no habrá impunidad para quien haya infringido la ley.
En el Centro de Convenciones de esta ciudad anunció que trabajará para recuperar la confianza de los potosinos, en un gobierno que se ajuste a las normas. “Los potosinos no quieren servidores que no cumplan con su deber y que no se ajusten a la ley, ¡yo tampoco!”, enfatizó.
Prometió a los actores y fuerzas políticas del estado una relación basada en el respeto, la colaboración y el espíritu de inclusión, “consciente del estancamiento al que conduce el desacuerdo social”.
Convocó a establecer un compromiso común basado en la legalidad y en el diálogo permanente y respetuoso, “que una y nos beneficie a todos”.
Al acto asistió la secretaria de Salud, Mercedes Juan, en representación del presidente Enrique Peña Nieto; y como invitados los gobernadores de Aguascalientes, Campeche, Chiapas, Michoacán, Puebla, Querétaro, Sonora y Tamaulipas, así como los electos de Colima, Guerrero, Nuevo León y Querétaro.
“Me propongo renovar la confianza de la sociedad en sus instituciones con una administración honesta, competente y con espíritu de servicio”, dijo.
En la sesión solemne del Congreso del estado estuvieron líderes nacionales de los tres partidos políticos que abanderaron a Carreras en coalición: Manlio Fabio Beltrones (PRI), Jorge Emilio González (PVEM) y Luis Castro ( Panal).
El gobernador anticipó la creación de la primera Fiscalía Anticorrupción del estado y dijo que los servidores públicos que falten a los principios de honestidad, eficacia y vocación de servicio de su gobierno se irán a su casa y tendrán que atenerse a las consecuencia legales.
“En el ejercicio del gobierno no hay pactos, ni compromisos con nadie en particular. No habrá impunidad para quien haya infringido la ley, ni para quien lo haga en el futuro.