El dirigente del Sindicato Unico de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), Adolfo Calderón Nava, aseguró que el paro laboral que estallaron el lunes de la semana que está por terminar, por la demanda central del pago de un bono sexenal, ahora para 15 mil trabajadores burócratas entre sindicalizados, supernumerarios y de confianza, va a continuar hasta sus últimas consecuencias a pesar de la amenaza del gobierno estatal, de empezar a levantar este lunes, actas administrativas por abandono de empleo y porque según no tiene dinero para cubrirlo.
Mientras el gobernador interino de Guerrero, Rogelio Ortega Martínez, dio a conocer que la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCyA), declaró ilegal el paro laboral, porque el pago de un bono sexenal por terminación de la administración gubernamental, no está contemplado en sus derechos laborales, y porque además: “el gobierno no cuenta con recursos para pargarlo”.
El secretario de Gobierno, David Cienfuegos Salgado, indicó por su parte que a partir de este lunes, iniciarán el levantamiento de actas administrativas y los descuentos salariales correspondientes, que se verán reflejados en la segunda quincena de este mes, mientras que el gobernador interino Rogelio Ortega, les pidió a los trabajadores en paro a que “no pongan en riesgo sus trabajos”.
Propuso a los dirigentes sindicales del SUSPEG, que ahora que la JLCyA, decretó como ilegal su paro laboral a que acepten una mesa de diálogo para discutir los términos en los que puede solucionarse el conflicto laboral que estalló hace siete días.
Ante esta posición del gobierno estatal, el dirigente del SUSPEG, dijo que analizarían esta última propuesta del gobernante guerrerense, pero que de entrada el paro laboral va a continuar con todo y la amenaza de despidos laborales y descuentos salariales, e hizo un llamado a sus representados a mantenerse firmes en el movimiento laboral que sostuvo que “es legal porque existen documentos firmados por funcionarios del gobierno en los que se comprometen a pagar el bono sexenal”.
Informó que al movimiento laboral se han sumado policías, maestros de la Sección XVIII del SUSPEG, del Servicio Estatal del Empleo (SEE), empleados de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero (CDHEG), así como de las oficinas de dependencias estatales instaladas en los municipios de Acapulco, Zihuatanejo-Ixtapa, Atoyac, Técpan, Iguala, La Unión, Altamirano, Arcelia, entre otros.
En tanto, trabajadores burócratas que mantienen el paro laboral en las dependencias ubicadas en el centro de esta capital, volvieron a instalar el bloqueo sobre varias calles céntricas, luego que las desbloquearon el sábado pasado por la manifestación de los padres de familia de los 43 normalistas desaparecidos, maestros de la CETEG, estudiantes de Ayotzinapa y organizaciones no gubernamentales, al cumplirse un año de la desaparición de los 43 jóvenes el 26 de septiembre del año pasado en Iguala.
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