Cuernavaca.— Luego de casi tres meses de ausencia en Cuernavaca, el alcalde electo, Cuauhtémoc Blanco, reapareció públicamente para el acto de entrega-recepción de administración y aseguró que su trabajo como alcalde inicia hasta el 1 de enero de 2016.
El ex futbolista se reunió a puerta cerrada con los regidores electos, y al final el presidente municipal de Cuernavaca para el trienio 2016-2019 adelantó que los temas de seguridad, agua, luminarias y bacheo serán su prioridad, porque eso le pidió la gente durante su campaña.
“Tenemos un Cuernavaca abandonado y lo queremos cambiar”, aseveró, y enseguida manifestó su rechazó a la idea de privatizar el servicio de alumbrado público, e incluso responsabilizó al gobernador Graco Ramírez, a quien adjudicó una presunta injerencia en la concesión por intereses económicos. “Graco quiere agarrar todo, no quiere dejarle nada al presidente municipal”, sostuvo.
Blanco negó además que estuviera de vacaciones y que por ello no se hubiera realizado la entrega-recepción con la actual administración.
Aseguró que dicho proceso se llevó a cabo el pasado viernes, y por ello hasta este miércoles se reunió con su cabildo.
Sin embargo, el Cuau no presentó propuestas concretas sobre el modelo de gobierno que seguirá a partir del próximo 1 de enero, cuando aseguró, se pondrá a “chambear”.
El alcalde electo se reservó sus comentarios respecto al tema de los feminicidios en la capital del estado, a pesar de que la primera semana de agosto el gobierno federal emitió la Alerta de Violencia de Género en ocho municipios de la entidad, entre ellos Cuernavaca, por los altos registros de mujeres asesinadas con violencia.
Sobre este tema, Blanco Bravo se limitó a decir que lo analizará con su equipo de trabajo. Adelantó que será hasta diciembre cuando integre a sus secretarios pero, afirmó, está rodeado de gente de toda su confianza.