Villahermosa.— Considerado como el zar del robo de combustible en Tabasco, Sergio Meza Flores, alias el Soruyo, fue puesto en libertad luego de haber obtenido la protección de la justicia federal, según dio a conocer el delegado en Tabasco de la Procuraduría General de la República (PGR), Francisco Javier Pulido Morales.
Entrevistado luego de acudir a la puesta en marcha de los juicios orales en el municipio de Nacajuca, el funcionario de la PGR sólo se limitó a confirmar que Sergio Meza obtuvo su libertad bajo caución y que la dependencia federal interpuso un recurso de revisión que aún no se ha resuelto.
“Fue puesto en libertad, pero fue decisión del juez. Desde luego se interpuso el recurso de revisión, pero eso es cuestión del juez también”, señaló el funcionario.
La detención de Sergio Meza se dio el pasado 31 de julio por elementos de la Policía Federal, del Ejército y de la Procuraduría General de la República en el municipio de Cárdenas, zona donde tenía su base de operaciones y que abarca hasta Huimanguillo, localidad colindante con el estado de Veracruz, en donde se encuentran los ductos más importantes de Pemex.
Durante la captura, también le aseguraron un arsenal con armas de alto poder, dos pipas y miles de litros de combustible.
Sigue escalada de “ordeñas”. De acuerdo con datos de Petróleos Mexicanos, el crimen en Tabasco abrió 45 tomas clandestinas en 2012. Para 2013 la cifra aumentó a 120 y para 2014 el número de ordeña se disparó a 275. Hasta el mes de junio se habían reportado 236 tomas, lo que ha significado pérdidas millonarias para la empresa.
El Soruyo no sólo es considerado el líder de los ordeñadores de gasolina en el estado de Tabasco, sino un cacique que contó con la complicidad de líderes comunitarios y delegados municipales, a quienes les regalaba combustible dejando fugas abiertas que incluso, han terminado en tragedias.
Se sabe que la Fiscalía General del Estado también investigaba a Meza por otros delitos cometidos en los municipios que comprenden la zona de la Chontalpa.