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La Procuraduría General de la República aseguró en un establecimiento de comida y en un domicilio particular más de 800 kilogramos de especies marinas protegidas por la ley y en peligro de extinción.
Los agentes federales, adscritos a la Agencia de Investigación Criminal se dieron cita en un restaurante de comida oriental, así en un casa en el centro de Guaymas, Sonora, para ejecutar una orden de cateo que derivó en una averiguación previa que se integra por violación a la ley de protección ecológica.
En los sitios fueron descubiertos, en refrigeración, 19.16 kilogramos de caballo de mar seco; un kilogramo más de ese producto fresco y congelado; 271.50 kilogramos de pepino de mar seco, así como 648.10 kilogramos del producto, ya sancochado.
Todo lo asegurado quedó a disposición de la representación social, adscrita a la Unidad Especializada en Investigación de Delitos contra el Ambiente.
jlcg
