Más Información
Osiel Cárdenas, exlíder del Cártel del Golfo, recibe auto de formal prisión; enfrentará juicio por homicidio
Jóvenes mexicanos pasan más de 2 mil horas al año en el teléfono; OCDE alerta sobre su impacto en la salud mental
Sergio Gutiérrez Luna destaca aprobación de 25 reformas en la 66 Legislatura; "Un logro histórico para la 4T", señala
Secretario de Agricultura reafirma defensa del maíz blanco; "Seguiremos apoyando la producción nacional no transgénica", afirma
¿Maíz transgénero? Rubén Rocha corrige desliz durante discurso en Sinaloa; destaca importancia del maíz blanco
Sheinbaum asegura apoyo total a Sinaloa para enfrentar violencia; "Nunca los vamos a dejar solos, aquí está la presidenta"
erika.monroy@eluniversal.com.mx
¿Por qué alguien renunciaría a su libertad de forma voluntaria? Hay personas que tienen sus razones de peso para hacerlo. Una de ellas es Monalisa, una mujer que decidió entrar a la cárcel para saber lo que su propia hija estaba viviendo.
Ella, a través del reality 60 días preso que produce A&E y que estrena su segunda temporada hoy a las 23:00 horas, experimentó lo que es perder su libertad y estuvo de cerca de personas “buenas, malas y muy malas”.
“Creo que este tipo de programa sí ayuda a las personas que están en problemas y les hace entender lo valiosa que es la libertad”, explicó Monalisa vía telefónica. Ella aseguró que nunca antes había visto el programa, pero que después de que su hija llegó a prisión, entrar a esta experiencia le ha hecho mejorar su relación con ella.
El programa 60 días preso muestra a un grupo de inocentes que ingresa por su propia voluntad a la cárcel del Condado de Clark, dirigida por el alguacil Jamey Noel, en donde cada uno de ellos vivirá durante 60 días la incomparable experiencia y ofrecerá a los espectadores una mirada directa, real e impredecible sobre la vida en una prisión de máxima seguridad.
“Te das cuenta de cómo funciona una cárcel y todos los problemas que hay, cuántas filtraciones tiene y que realmente no se puede confiar en el sistema de seguridad que ahí hay”, agregó la participante, que de por sí no tenía una buen imagen de los polícias.
El condado de Clark aloja alrededor de 500 prisioneros, desde acusados por tráfico de drogas, personas con una primera experiencia en la cárcel, hasta otras acusadas por asesinato. La seguridad de los participantes es la principal prioridad, por lo que el alguacil Jamey Noel reimplementó el programa antes de que el primer grupo completara el experimento.
Debido a las historias de corrupción en la prisión en Clark (Jeffersonville, Indiana) el alguacil Jamey Noel pensó en realizar un programa en el que un grupo de inocentes viva durante 60 días junto a la población de la instalación carcelaria, sin que los oficiales, el personal, e incluso los otros reclusos conozcan su secreto. En esta nueva temporada, y a diferencia de la primera, ocho serán los valientes participantes de este audaz experimento social cuya primera serie rompió paradigmas y batió récords de audiencia.
La primera temporada llamó particularmente la atención debido a que la hija mayor de Mohamed Ali, Maryum Ali, decidió ser parte del experimento. “He trabajado con pandillas durantemuchos años. Con jóvenes a los que les decimos cómo evitar que lleguen a la cárcel y quiero demostrarles que yo sé de qué se trata”, explicó Maryum en aquella ocasión, quien confesó que su familia no supo de esta aventura, ni siquiera su padre, uno de los más famosos atletas que murió hace unos meses, pero que sí alcanzó a ver unos fragmentos del programa.