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“Son cosas propias de la edad”, dice Rubén Aguirre, “El Profesor Jirafales”, al referirse a la diabetes que padece, al dolor constante en la columna tras un accidente automovilístico que hace años los dejó a él y a su esposa en silla de ruedas y a una insuficiencia renal que ya lo ha llevado al hospital anteriormente, pero que ahora no puede tratarse por un adeudo de la Asociación Nacional de Actores con el hospital al que acude y que, afirma, la ANDA se niega a pagar.
“Ahorita ya estoy urgido de internarme otra vez y no me atrevo a pedirle al hospital que después de que no le han pagado todavía me fíen otra entrada”.
Enfermo y con un tono de voz decaído, el actor cumplió ayer 81 años de vida y su único deseo, platicó a EL UNIVERSAL, es que la ANDA les garantice a él y a su esposa el acceso al servicio médico, ya que hasta ahora el sindicato sólo ha pagado 36 de los 111 mil pesos que se deben al hospital CMQ de Puerto Vallarta, por lo que no lo pueden recibir. La pensión vitalicia que recibe por parte de Televisa tampoco le alcanza para pagar su salud, pues con ella cubre su alimentación.
Comentó que aunque ha expuesto su situación a actores como Rafael Inclán y antes a Silvia Pinal, no ha pasado de promesas de soluciones que nunca llegaron. Incluso, le han externado que el problema es que no existen convenios con hospitales de Vallarta.
“A partir de este momento yo hago responsable a la ANDA del detrimento de mi salud y el de mi esposa que ocasione este descuido”, declaró.
El actor recalcó lo irónico de que un sindicato, cuya secretaria general es la actriz Yolanda Ciani y que debería defender los derechos del actor, se los niegue, como ha pasado con otros compañeros suyos.
“Llevo años y años de estar batallando para que me paguen las consultas, últimamente ya no quieren pagar nada”, señaló y expuso la situación en la que se encuentra su pareja.
“Mi esposa necesita un tratamiento que solamente se pueden darle en un hospital; ya perdió un ojo, tenemos miedo de que pierda el otro, sería terrible que se quedara ciega totalmente”.
Sobre si teme que su salud se deteriore más, comentó que más bien siente enojo por la situación.
“Tengo coraje, no sé cómo decirlo, tengo coraje por no poder hacer nada, porque después de 50 años de estar cotizando puntualmente ahora me niegan el derecho de cualquier asociado que llegó a mi categoría”.
Ahora, Aguirre sólo tiene un deseo de cumpleaños:
“Ya hice muchas cosas en mi vida, lo que ansío es tener una cierta calidad de vida, vivir sin tantos dolores, sin tantos achaques... es lo que más deseo y para eso necesito a la ANDA”.
Verónica, hija de Rubén Aguirre, explicó que el pago que se hizo al hospital fue gracias a la ayuda de Mara Patricia Castañeda, pues esta lucha lleva 10 años; desde entonces, la ANDA se negó a ayudarlos cuando sufrió el accidente, pero en aquella ocasión cubrieron sus gastos con su seguro médico.
“A Lourdes Pellegrino (Secretaria de Previsión Social de la ANDA) le dije: ‘Oiga, mi papá es un socio honorario, tiene 50 años cotizando’ y se atacó de risa respondiendo: ‘aquí habemos muchos honorarios’”.
Verónica también compartió que ahora los servicios de salud tienen un tabulador. “Desde que estaba Silvia Pinal empezaron a aplicar un tabulador sin aviso de por medio”.
Solidario. El secretario del Trabajo y Conflictos de la ANDA, Felipe Nájera, comentó que sí han respondido la demandas del actor, pero reconoce que la institución tiene muchas fallas.
“Reconozco y estoy con él en su queja en cuanto a que la ANDA tiene muchas incapacidades y deficiencias no sólo en cuanto al servicio médico, sino en resolver la problemática económica que estamos viviendo”, dijo.
También señaló que no es argumento por parte de la ANDA negar un servicio de salud alegando que no hay convenios con hospitales de la región.
