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aridiana.banos@eluniversal.com.mx
Para los actores Benny Ibarra y Carlos Corona el tiempo ha pasado tan rápido y se la han pasado tan bien que les sorprende darse cuenta que están por celebrar 100 representaciones con El hombre de la Mancha mañana
“Hay un ambiente muy relajado y creo que hay algo que nos une, que es que a todos nos gusta mucho la obra, damos funciones con ánimo, dura más de dos horas la historia y ni lo sentimos”, compartió Carlos Corona, quien da vida a Sancho.
Para Benny, que tiene el doble papel de Cervantes y de Don Quijote, no hay mejor recompensa que después de más de un centenar de funciones el Teatro Insurgentes siga lleno y con los integrantes de la compañía llevándose mejor que nunca. “Creo que las 100 representaciones es el momento de agradecer, porque nos la pasamos increíble y hasta nos pagan”.
Entre las sorpresas que la producción tiene para celebrar, está la presencia de Diego Luna como padrino de develación de la placa. “A Diego lo conozco desde hace muchos años, él es alguien que creció en las tablas, porque su papá es uno de los escenógrafos más importantes de este país, Alejandro Luna, y me da mucho gusto la carrera que ha hecho, es alguien que quiero y respeto”, dijo Corona.
El hijo de Julissa compartió la opinión de su compañero en escena, y confía que el invitado de honor se la pase de maravilla con su trabajo y el de sus colegas “porque la gente sale emocionada, con un mensaje, sale muy estimulada con lo que ve en nuestro show y ese es el pago máximo que puede tener un artista”.
Si bien Benny lleva 100 funciones dando vida a este caballero, aeguró que no se confía. “Lo bonito de El Hombre de La Mancha es que no sabes para dónde va, el Quijote es es un personaje tan entrañable y generoso, que es muy probable que lo pueda seguir cambiando en algunas cosas y eso me matiene como actor muy motivado, porque te hace decir, lo puedo hacer mejor”.
Parte de seguir descubriendo nuevas facetas de este personaje depende mucho de la empatía que tenga con Carlos Corona, tanto dentro como fuera del escenario y el intérprete de Sancho considera que sí la hay, porque entre ellos ha surgido la amistad y hasta ha logrado ver un poco de Quijote en el cantante. “Es como un niño viejo y sabio, ese espiritu está en Cervantes, el Quijote y Benny, yo quisiera creer que también hay algo de Sancho en mí. “Siempre he tenido ese espirítu, no es que sea mío es una copia de la energía de la familia, mi padre y mi madre son iguales”, agregó el ex Timbiriche.