aridiana.banos@eluniversal.com.mx
El productor Sergio Arroyo aclaró que el objetivo del musical Carrie, que se estrenará el próximo 4 de marzo en el Teatro NH, no es asustar al público, “es una obra en que el mismo drama te va a dar escalofríos, eso sí hay muchos efectos especiales”.
En los pasillos del teatro ya se pueden ver parte de las piezas que se necesitarán para recrear en cada uno de sus rincones el escenario en el cual se lleva a cabo esta historia, el gimnasio de una preparatoria, y que deberá ser armado en tan sólo tres días con el fin de que el elenco encabezado por Daniela Luján comience la siguiente semana a ensayar con la escenografía.
El productor explicó que el motivo por el cual se ocupará cada área del teatro es porque quieren lograr que la gente tenga una experiencia de 360 grados, debido a que la acción no se limita al escenario sino que ésta llegará hasta cada una de las butacas.
“Buscamos que el público no sólo vea la destrucción, sino que viva la destrucción. Desde que la gente entra al teatro verá cosas quemadas, que ya hubo una muerte aquí, siempre es feo entrar a un lugar donde pasó algo trágico”, declaró Sergio Arroyo.
Sangre brotando por todos lados y cosas que se mueven solas de su lugar son algunos de los efectos especiales que se utilizarán en esta puesta en escena, que se desarrolla entre los recuerdos y la actualidad.
Para hacerse cargo de este trabajo, Arrollo confió en los escenógrafos Ricardo García Luna y Aurelio Palomino, cuya experiencia se ha desarrollado en el teatro universitario, espectáculos de danza y ópera, y que vieron en este proyecto todo un reto a su creatividad.
“Tuvimos que modificar el escenario, abrirlo literalmente, empezar a buscar en el mismo espacio las posibilidades para recrear la ambientación de diferentes escenas, colocar a los músicos, incluso en el techo tendremos cosas escenográficas, queremos generar una sensación envolvente en el foro para que se sienta de otra forma el recinto”, señaló García Luna.
El objetivo: demostrarle al público que no es necesario un enorme escenario para realizar un musical, por lo cual contaron con la asesoría de la producción que montó la obra en Nueva York y que siguieron paso a paso la realización de la escenografía, hecha totalmente por manos mexicanas.
Aurelio Palomino dijo que la ambientación no responde a alguna época, sino que es totalmente atemporal, además de que ha sido pensada para que Carrie viaje a otros teatros.
Sergio Arroyo comentó que se realizó una inversión de más de un millón de pesos, pero que era necesario hacerlo porque es la primera vez que Carrie se monta en español.
