jose.montoya@eluniversal.com.mx
Una fusión de sonido urbano envuelto en naturaleza fue lo que congregó la segunda edición del Festival Vaivén en Jardines de México, que a través de tres distintos escenarios, juntó a artistas de diversos géneros, como Okills, Salón Acapulco, Niño Árbol y Tom & Collins, quienes pusieron a bailar a los asistentes.
El dueto Black Pistol Fire, quien hizo que los asistentes brincaran al compás de su guitarra y batería, confesó en entrevista que espera volver a la ciudad con su nuevo disco bajo el brazo.
“Hace ocho años decíamos: ‘sería genial tocar en algún escenario de México’ y ha sido asombroso”, apuntó Eric Owen, baterista.
La banda mexicana DLD se encargó de darle el toque de rock al festival antes de que la lluvia los hiciera terminar su participación. Por lo mismo, la presentación de Mon Laferte se atrasó más de 20 minutos.
Previamente, la cantante chilena dijo que lo bueno de este año no sólo se traduce en sus conciertos, sino en cómo ha podido crecer como persona. “Entre montar un auditorio y después tener que estar de gira, ensayos, el disco… Ha sido un año muy alegre”.
Laferte explicó que parte de esa felicidad radica en disfrutar el momento, así como de las amistades, como la que entabló con Juanes, a quien acompañó el viernes en su concierto, tal como lo hiciera él con ella durante el Festival Vive Latino. “Cuando a mí se me ocurrió hacer el dueto nunca pensé que iba a ser posible y al final resulta ya tenemos una bonita amistad”.
Otras de las sorpresas del festival, Matt and Kim, dúo originario de Nueva York, confesaron que ya están trabajando en un nuevo disco con el que esperan sorprender a sus fans.
La velada continuaría después con las presentaciones de Sigala y Galantis con su característico sonido dance; mientras que Empire of the Sun ofrecería un despliegue de animaciones, fuego, humo y bailarinas con atuendos estrafalarios, como androides y mujeres con peinados gigantes, que lograron un ambiente futurista.
Los australianos se encargaron de llevarse los aplausos de la gente al interpretar temas como “Walking on a Dream”, “Alive” y “We are the people”, que serían acompañadas con coreografías alrededor de todo el escenario y que junto con las luces, encendieron los ánimos.