Si a Mariah Carey le importo poco ser la protagonista de la primera polémica del año tras el desastre en el se convirtió su actuación en playback en el primer concierto del año en Times Square, menos le importa a Justin Bieber, que ha comenzado el año decepcionando a sus fans y siguiendo los pasos de la cantante de "Touch my body".
Justin Bieber ofreció un concierto en Miami en una fiesta organizada por el complejo hotelero Fontaineableau, junto a los artistas Skrillex y Marshmello, y aunque el cantante canadiense estaba más emocionado y entregado que en la mayoría de sus actuaciones el playback era tan evidente que los espectadores no pudieron evitar llevarse una decepción.
"Sorry" era una de las actuaciones más esperadas de la noche, pero para sorpresa de sus seguidores Bieber se subió al escenario para hacer playback y no disimularlo, alejando en varias ocasiones el micrófono de su boca mientras la música seguía sonando.
En mitad de su exaltada actuación el cantante Skrillex le anima a bailar la mítica "macarena" para lo que el Justin abandona el micrófono y ya el playback no puede resultar más obvio, eso sí, Justin disfrutó y se lo pasó muy bien dándolo todo sobre el escenario.
¡Mucho estaba tardando en generar polémica este 2017!
nrv