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“Es el nombre, es la marca, con esto no quiero decir que es mala su obra, pero no creo que haga una aportación relevante dentro del área. Creo que cualquier disciplina artística, incluyendo la música, tienen ciertos lenguajes y códigos que deben ser aprendidos”, dice Camacho Lara, egresada de la Escuela Nacional de Artes Plásticas.
Esta experta recordó la obra que el rockero Marilyn Manson presentó en México en 2011 en el Museo de San Ildefonso, bajo el título The Path of Misery, compuesta por 30 acuarelas. “Es por curiosidad que tienen fuerza sus muestras. Manson expuso una serie de acuarelas que parecían más autorretratos, que incluso ha aportado en algunos de sus atuendos y recreado en algunos de sus videos, sin embargo me parece que sólo se quedaba en ilustraciones de lo mismo, no había una técnica pulida, incluso no llegaban a ser acuarelas, eran más bocetos de sus personajes”.
El crítico de arte Santiago Espinosa concuerda y hace memoria de esa misma exposición diciendo incluso que seguramente de no haber sido por el nombre de Manson San Idelfonso no hubiera abierto puertas.
“Quedaba claro que lo importante no eran las pinturas, de bajísima calidad y poco propositivas, sino el autor. Estoy casi seguro de que si esas obras no pertenecieran a su autoría, apuradamente atraerían la atención de algún galerista”.
Sobre un posible valor de estas obras a futuro, la doctora en Historia, Julia Palacios, explicó que éste respondería más a una cuestión de mercado. “Son objetos que van a ir a los museos pero como colección o para una subasta, es otro tipo de objeto, como la exposición que se montó el año pasado en París, David Bowie is, que era de cosas relacionadas con el músico y no de su obra en sí”.
Por ejemplo, con John Lennon se han vendido sus creaciones en galerías a muy buenos precios, que subieron aún más después de su fallecimiento. “Son dibujos divertidos y simplones que poco aportan a los debates sobre artes visuales, pero cuyo autor, venerado por muchos, evidentemente incide en que el coleccionismo desee poseer una de esas piezas no por la pieza en sí misma, sino por quien estuvo detrás en su factura”, explicó Espinosa de los Monteros.
Pero la doctora Julia Palacios subrayó: “cuando eres un artista siempre van a estar abiertas muchas otras opciones del arte, y un artista completo más allá del arte que haya escogido para expresarse, va a estar abierto a ellas, hay una sensibilidad innata que le permite ver y apreciar otras formas”.