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Tras una larga remodelación que tardócasi dos años, el Auditorio Nacional reabrió sus puertas el seis de septiembre de 1991 con la obra Carmina Burana y la compañía nacional de danza.
Actualmente, el foro cuenta con nueve mil 366 asientos, dos niveles de estacionamiento y un escenario con 23 metros de altura por 23 de ancho.
Desde la reapertura, el recinto, también conocido como el Coloso de Reforma pasó de estar a cargo del gobierno de la Ciudad de México a un fideicomiso tripartito entre el gobierno federal, el del Distrito Federal y la iniciativa privada.
Desde 2002, el recinto —considerado uno de los más importantes de América Latina— entrega el galardón Las Lunas, el cual premia a lo más destacado que se presenta en sus instalaciones.
Si de espectáculos se habla, desde que la televisión llegó a México en 1946, el entretenimiento se rigió por una empresa, Televisa.
Pero 1993 sería el año en el que este monopolio se rompería con la creación de Televisión Azteca, que inició transmisiones el 2 de agosto de ese año con el melodrama El peñón del amaranto, protagonizado por Rosana San Juan.
Entre las transmisiones exitosas de la época de los 90 de la empresa del Ajusco —que se asoció a Argos en un inicio— se cuenta A flor de piel, Con toda el alma y Nada personal, protagonizados por actores que antes estaban en Televisa como Marco Muñoz, Andrés García, Gabriela Roel, Ana Colchero, Mariana Garza, entre otros.
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