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cristina.pineda@eluniversal.com.mx
Ciudad Juárez.— Dice que Juan Gabriel cerraba la cantina La Rueda para divertirse y que cobraba 20 dólares por cantar en una fiesta familiar. Enrique Rodríguez, habitante de Juárez, habla a un lado de lo que fue El Noa Noa, el lugar donde El Divo comenzó su carrera.
El sitio se encuentra a unos cinco minutos, caminado, del puente fronterizo que une a la ciudad chihuahuense con EU. “Lo conocí cuando salió de la correccional para menores, eran como las seis de la tarde y él tenía 16 años y medio; lo dejaron salir porque a la otra que hiciera, iría a la cárcel, y nos pidió para el camión”, cuenta Rodríguez.
“Luego en los 70, me lo encontré como tres veces en la cantina La Rueda y la cerraba ¡era un despapaye!”, agrega.
En ese entonces Ciudad Juárez era muy pequeña. Entonces podía coincidir en varias ocasiones la gente.
Por ello no es raro que, tiempo después, el entrevistado y Juan Gabriel coincidieran en una boda. “Cobraba 20 dólares por cantar y no lo dejaron”, cuenta.
Habla también del Noa Noa, nombre por ahora en litigio.
“Cuando se quemó el Noa Noa, según él (Juan Gabriel) lo registró, por eso ya no se volvió a construir, porque estaban en pleitos legales (con el dueño)”, dice.
El pueblo se entera de todo.
