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cesar.huerta@eluniversal.com.mx
Molotov estalló con la fuerza de una bomba atómica, pero en lugar de desintegrar y tirar a lo que se atravesara, generó un oleaje humano que nunca amainó. Si las manos se alzaron con “Here we kum”, con “Parásito” saltaron y con “Frijolero” simplemente no hubo manera de que alguien se abstuviera de corearla.
El Palacio de los Deportes se convirtió por casi dos horas en el de los “rebotes”, pero no por la crítica que suele hacerse a su acústica sino porque cualquier dron habría captado desde la altura que de la fila uno a la última, las piernas impulsaban a la gente a saltar sobre su lugar, así como condones inflados.
También hubo individuos aventados a los aires, por un grupo descamisado, cercano al escenario. Y si Carlos Gardel cantaba que 20 años no son nada, Micky, Tito, Paco y Randy confirmaron la frase el viernes.
“Estar aquí con ustedes está poca madre”, dijo Tito arrancando uno más de los alaridos y silbidos de la velada. “¡Somos una banda vintage!”, expresaría minutos después Micky de apellido Huidrobro.
El concierto se respiraba desde la estación Velódromo, del Metro, donde pegados a los torniquetes y a poca distancia de policías, al menos media docena de personas ofrecía boletos de reventa o compra de sobrantes.
Vendedores que optaron por ofrecer los paliacates y pulseras negras conmemorativos a 10 pesos se quedaron con varios de ellos, pues la gente enfocó su dinero en playeras grises con mangas negras o rojas, en 100, o con la imagen estilizada de un águila al mismo precio.
Los Pumas de la UNAM latieron virtualmente a través de las camisetas que varios portaron, reconociendo al equipo de futbol favorito de la banda. También Gael García Bernal y Diego Luna estuvieron en espíritu cuando el grupo que vendió un millón de copias con su álbum debut interpretó “Here comes the mayo”, tocada en la película Y tu mamá también.
Hasta Donald Trump el candidato estadounidense a la presidencia recibió un recuerdo con “Voto latino”. Una bala perdida para él”, señaló el grupo. Molotov se convirtió también por segundos en servidor social y ayudó a encontrar la cartera robada de un joven llamado Omar.
“No sean... y devuélvanla, ¿qué tal si fuera de ustedes?”, exclamó Tito.
Al final la banda se despidió entre aplausos. “Gimme the power”, “Marciano” y “Yofo” integraron una lista de 34 canciones que culminó con la emblemática “Puto”.