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Mucho tiempo se la vivieron en carretera porque Juan Gabriel no podía subirse a los aviones. Era una fobia que le costó superar, recuerda Darío de León, quien fuera su mánager por 20 años.
Su historia juntos comenzó negociando presentaciones en Baja California en los 80, lo que lo llevó a convertirse en su mano derecha; Darío vivió con él los ocho años en los que no quiso grabar nada.
“No tenía buena relación con su compañía discográfica de aquel momento, decía que no era correcto que se hubieran quedado con sus canciones, y dejó de grabar y a mí me tocó renegociar el contrato donde le empezaban a regresar sus canciones. Nos llevó un año entero la negociación que era toda la semana y muchas horas al día pero lo logramos gracias a su espíritu de lucha y la certeza que él tenía de ser dueño de su catálogo otra vez”, recordó en entrevista con EL UNVIERSAL.
Hoy, años después de concluir su trabajo juntos, De León reconoce la gran enseñanza que obtuvo.
“Era una persona profundamente sensible a todo, al amor, al desamor a las situaciones que nos rodean, a las cosas bonitas, a las cosas que la vida nos va poniendo de frente cada día y con una capacidad de amar a todos los seres que tuvo al lado de él, toda la gente, toda la familia”.
Ante la noticia de su partida, Darío dice que este momento para él se encierra en una de sus canciones y que es para él el símbolo de las despedidas: “Amor eterno”.
“Indudablemente que si él hubiera dicho ‘quiero que me despidan con una canción’, la canción sería esa. ‘Amor eterno’ es todo eso: el amor al ser querido, el amor al ser que ya se nos fue”.
Desde Estados Unidos, Diego Verdaguer recuerda con tristeza a uno de sus más preciados amigos. Él, Juan Gabriel y Amanda incluso conservan una grabación casera en la que los tres dieron voz a “Que sufras más”, tema de Verdaguer y que era de los favoritos de Juanga.
“Él la está cantando junto con Amanda, ella está en el piano, yo en la guitarra y él está cantando... muy bonita la grabación. Es una grabación de casa, pero creo que debido a las circunstancias merece la pena que la gente la conozca, que conozca lo simples que son las cosas a veces, son simples, son momentos de cariño de admiración, porque los artistas se juntan cuando hay admiración mutua”.