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Esta semana, a Gerardo Ortiz le giraron orden de aprehensión, tras ser acusado de hacer apología del delito, a través de un video que, de acuerdo a la Secretaría de Gobernación y ONG, incitaba al machismo y la violencia. Pero las canciones con este tipo de mensajes no son exclusivas del género grupero o de banda, aunque es en éstos que han predominado en los últimos años.
El tema “Fuiste mía” generó al cantante cancelaciones de conciertos y una investigación por parte de la Procuraduría General de la República (PGR); las críticas no sólo le llegan a él sino a sus compañeros de género.
Sin embargo, Blanca Martínez La Chicuela, conductora en Bandamax, no está de acuerdo en criticar sólo al género grupero. Argumenta que los artistas que salen de ese género son los que mantienen a las compañías disqueras al vender grandes cantidades de discos en físico y digital.
“Respeto el gusto de cada quien, pero creo que siempre se les juzga de una manera más marginal por tratarse de música para el pueblo. Desde llamarlo música de nacos hasta que son machistas. Con otros (como el reggaetón) nunca se han ensañado tanto como con el género regional mexicano”.
Días después del suceso con Ortiz fue Julión Álvarez quien se refirió a las mujeres como útiles sólo si sabían agarrar un trapeador. “No me culpen las mujeres ni me tachen de misógino”, dijo al afirmar que el tipo de mujer que a él le gusta incluye saber hacer las labores domésticas.
“Me molesta que por un comentario que hace Julión, lo ponen como si denigrara a la mujer o que es machista; ese no es Julión Álvarez. Tengo mucho tiempo de conocerlo y lo atacan de una manera más negativa por ser del regional mexicano”, agregó la conductora.
Hay quienes han criticado al género por años y son los mismos exponentes quienes reconocen que por unos pagan todos. Así lo expresa el vocalista de la agrupación Los Recoditos, Sergio Sarmiento. “Fuimos juzgados de ser música sólo para borrachos, para cantinas y decían que era música para nacos.
“En mi casa con mis padres jamás se escuchaba la música de banda o ranchera. Pero no todas las letras hablan de narcocorridos, de corrientadas o cosas malas. Creo que nuestra música es para alegrar a la gente, nunca pasa por nuestra mente incitar a la violencia o que las personas se alteren”, comentó el cantante.
La Chicuela lleva trabajando más de 30 años en el género regional mexicano, por eso dice que, desde muy niña se dio cuenta que no era algo exclusivo. “En cualquier otro hay letras que son muy fuertes o eróticas, en el rock, en el pop o en cualquiera.
“También hay unas que llevan groserías, atacan al hombre como las que canta Paquita la del Barrio. Pongo de ejemplo una canción de Los Recoditos que se llama ‘Ando bien pedo’, que es una expresión muy mexicana para decir ando borracho Fue un hit de radio, ganó premios pero a mucha gente le agrede la letra y eso es muy respetable. Pero así como esa canción, hay otras de rock, pop o reggaetón que también son fuertes, que tratan el tema de la mujer o del hombre de una manera agresiva”, argumentó.
Espinoza Paz considera incluso que las cosas han cambiado en el género y sus letras: “Creo que existe un estigma contra el regional mexicano, piensan que todos hablamos de violencia y narco, pero habemos otros que somos más románticos. No te voy a decir que estoy en contra de lo que mis compañeros hacen pero también en una verdad que, si esas canciones existen y hay grupos que las cantan también, es porque hay gente que quiere escucharlas. Creo que en este negocio hay gusto para todos”.
