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El príncipe ha muerto, esta mañana se confirmó el deceso de Prince a los 57 años de edad, músico perteneciente a una oleada de artistas nacidos en las décadas de los 40 y 50 que consiguieron tomar las raíces de la música negra y reinventarse.
Con la partida del originario de Minneapolis, Minnesota, se va una carrera dedicada a la originalidad, la reinvención y la propuesta, que supo tomar las raíces músicales de sus antecesores y hacerlas suyas, llevándolas a otro nivel.
Para Jorge Soto, crítico musical, la estatura del artista (1.57 metros) eran inversamente proporcional a su talento, carisma, pero sobre todo a su fuerza sobre el escenario, la cual sólo era superada por su arriesgada manera de llevar su carrera musical.
“Nunca se ciñó a los cánones de la industria del disco, incluso tuvo una situación original cuando cambió su nombre por un símbolo, esa era una muestra y su sello característico, nunca se sujetó a ninguna regla”, dijo.
Muestra de ellos fue cuando decidió continuar su carrera de forma independiente, tras tener problemas con su disquera de entonces, Warner Music.
Eso lo incitó a producir sus propios discos y los de algunos otros cantantes. De esta faceta se desprendieron discos como “Chaos and disorder” (1996).
“Cuando se lanzó de forma independiente se quitó el nombre y se puso un símbolo, ese era Prince. Consiguió tener una carrera contra viento y marea, pese a las exigencias de la época, de la industria musical, al final logró tener éxito”, dijo.
La muerte de pequeño gran músico, cuya discografía comprendió 39 disco de estudio, se une a la de otros artistas que nacieron en la misma época como David Bowie, Maurice White (Earth, Wind & Fire), Paul Kantner (Jefferson Airplane) y Glenn Frey (The Eagles), todos acaecidos este año.
“Prince pertenece a esta camada de músicos, que crecieron escuchando a grandes del blues, el soul y el r&b como James Brown, Muddy Waters o Bobby “Blue” Bland y que como en el caso de Prince, supo hacerlo supo y reinventarlo. Con su desaparición se va un artista muy innovador, cuya presencia en el escenario y su trabajo eran muy eclécticos, tenía una gama vocal muy particular, música que combinaba de manera muy acertada diversos géneros como el r&b, el rock, el funk y el soul, incluso el hip hop, el jazz, música disco, algo de electrónica, en ese sentido era muy original, porque además era cantante compositor, multiinstrumentista, fue actor”, añadió Soto.
cvtp