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Invitados de lujo son los que acompañaron a Juan Gabriel en una noche más en el Auditorio Nacional. Yuri, Carlos Rivera y Fernando de la Mora se unieron a los talentos que han compartido el escenario con el Divo de Juárez, quien se ha rejuvenecido con sus duetos.
En punto de las 20:33 horas, bailarines salieron a escena para brindar un recorrido por los típicos vestidos mexicanos. Portando saco y chaleco negros con camisa dorada, con el escudo nacional en la espalda, Juanga apareció con su mariachi para abrir con "Por qué me haces llorar", con la cual brindó y se echó el trago encima: "Por México, por ustedes y por mi", expresó.
21 músicos entre coristas, percusiones, trompetas y guitarras estuvieron con él en "Así fue" cuando emocionó a los casi 10 mil asistentes al bajar algunos escalones y acercarse a la gente. Una pantalla grande y cuatro rectangulares de cada lado lo proyectaron en "Mi fracaso", "Insensible" o "La diferencia", que fue el primer tema donde se escucharon los cantos de los asistentes.
Junto a 17 bailarines empezó a brindar pasos de baile en "Tu abandono" para, con señales, hacer gráfica la letra de "Inocente pobre amigo" en la cual incluso ya no encontró adjetivos calificativos para un hombre, por lo que pidió consejos entre los integrantes de su mariachi y las mujeres de su público.
"Ese no por el amor de un solo Dios que vamos a salir todos en el YouTube; las manos hablan más que las palabras así que fíjense", dijo mostrando sus partes intimas conforme cantó.
A los papás dedicó "Costumbres", en homenaje a Rocío Dúrcal, a las mamás "Lágrimas y lluvia" y continuó su repertorio con "No vale la pena" y "Caray", con las que pidió hacer un poco de ejercicio, puso al público de pie y brindó algunas vueltas sensuales.
Recordó también a su progenitora con los acordes de "Amor eterno" y, ya sin mariachi, sonaron "He venido a pedirte perdón" o "Frontera", con la que elogió al norte del país, no sin antes hacer un homenaje a 'Tin Tan' por sus cien años.
En 1971 escribió una canción que confiesa no sabe si lo si hizo famoso o él a ella, pero con "No tengo dinero" se animó a invitar a Zona Prieta en una versión más urbana para llegar a las nuevas generaciones.
Y así llegó el turno de su primer invitado: "Esta noche con ustedes su majestad el rey Carlos Rivera...", lo presentó. Después de cantar "Padre dame tu consejo" le dedicó más palabras: "Es un reinado que has hecho poco a poquito y me siento muy orgulloso y honrado que hayas nacido en nuestro país".
Con un traje negro, Rivera sonrió y se mostró emocionado. "México necesita más artistas como tú, para mí es un honor", le respondió.
El típico humor que caracteriza a Juan Gabriel no faltó en la velada, por lo que además de improvisar una versión en inglés de "Siempre en mi mente" argumentó que estaba cansado y pidió permiso para tomar agua.
"Es un gran señor que nos hace el honor de cantar la bella ópera con su hermosa voz y por vez primera en el Auditorio canta una canción mía", indicó ante la presencia de Fernando de la Mora a quien recibió con un cálido abrazo antes de "Recordándote", soñando entre violines.
"Señor es usted un mexicano admirable, es usted una gloria y me siento orgulloso de ser mexicano porque usted lo es. Es un privilegio estar aquí cantando para su público", afirmó el tenor mexicano.
El Juan Gabriel más sensual se quitó el saco ante el júbilo de los presentes, luego se desabrochó el chaleco y advirtió: "No me provoquen". En medio de "Yo no nací para amar" hizo una especie de streptease al quitarse el chaleco, agarrarlo con los dientes y colgarlo a su hombro para después abrirse la camisa y cerrarla en "Querida" o las rítmicas "Me nace del corazón" y "Pero qué necesidad", que pusieron de nuevo en órbita al mariachi.
"Ya no tengo nada que dar mañana, no vengan mañana. ¿Quieren saber qué es la armonía, el feeling, el ritmo, la cadencia? La hermosa, la única y la siempre guapísima y talentosa...un nombre tan sencillo y humilde pero muy nuestro es Yuri", así presentó a la veracruzana con quien compartió "El verdadero amor" y tras los gritos de otra "Se me olvidó otra vez".
Utilizando un vestido negro la cantante no dejó de abrazarlo y agarrar sus manos. "Gracias Alberto por esta noche; para mí es un placer y tú sabes cuánto que te quiero. Cuando me invitaron para mí fue un regalo en estos tiempos de prueba para cantar contigo, tú eres mi amigo te quiero, te admiro y lo que más quiero de ti es tu corazón y que amas a México como ningún otro cantante", afirmó antes de que la noche terminara a las 23:40 con "El noa noa".
mgg