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Fernando de la Mora tiene un recuerdo de su infancia: pasar el 15 de septiembre en la casa de campo con su familia porque, reconoce, la celebración de la Independencia mexicana no era tan importante en su vida.

“Era motivo de vacación y eso me emocionaba”, dice.

Sin embargo, una de las muchas cosas que cambiaron con su carrera como cantante fue precisamente esta celebración. “Empezó a tomar importancia porque era invitado por varias delegaciones, estados o países así que tuve conciencia de qué tan positiva es esta fecha, qué tan oportuna es de vez en cuando”, afirma.

Además, festejar cada año le da la oportunidad de crecer como artista y superar retos anteriores en el desafío que es para él transportar al público en un ambiente de gozo, mismo que llevará al Auditorio Nacional hoy junto a la Orquesta Sinfónica Mexicana, dirigida por Rodrigo Macías, el Mariachi Gama 1000 y el Trío Los Panchos.

En la denominada Fiesta Mexicana EnCanto por México. Homenaje a los Grandes Compositores Mexicanos sonarán temas de Agustín Lara, Gonzalo Curiel, Roberto Cantoral, José Alfredo Jiménez, Cuco Sánchez y Consuelo Velázquez, entre otros.

“La música sigue siendo un negocio y la que no vende se queda en el olvido, sólo queda en el corazón de a gente pero ellos mueren así que los que siguen ya no tienen chance y eso no se vale”, asegura el cantante.

Es por ello que armó la propuesta para una iniciativa para la Cámara de Diputados donde busca preservar la música mexicana.

“La idea está y lo voy a lograr porque va a ser en pro de México y no lo busco para que la gente me lo agradezca sino para yo agradecérmelo a mí mismo”.

Como parte de esta idea es que aprovechará su regreso al Coloso de Reforma para hacer un popurrí de tres compositores actuales y reconocidos.

El objetivo es innovar en un nuevo género e integrar su estilo con las nuevas generaciones.

“Me rodeo de gente que me habla con verdad y me dice cuando algo puede estar mejor, me aplico y lo logro.

“Me meto al bolero, al mariachi y la ópera y sueno a lo que requiero sonar. Ese es mi desafío: lograr emocionar al público, que la gente se involucre en lo que hago”.

Un nuevo futuro. De la Mora invitó a reflexionar sobre los acontecimientos recientes en México sin quedarse en el pesimismo o lo negativo, sino convertirlo en una oportunidad de cambio.

“No hay que quedarnos en la mediocridad del lamento y echarle la culpa a los políticos, tú eres responsable de lo que sucede como un mexicano nacido en esta tierra. Con una desidia o falta de interés de no mezclarnos en las cosas del gobierno y seguir permitiendo que México elija sus candidatos de esta forma y no cambiando.

“Cuando señalas el problema de Ayotzinapa ¿estás seguro que estás libre de ese problema y que no tuviste nada que ver? Yo no creo estar tan seguro; por supuesto que no maté a nadie, pero permití que eso sucediera con mi actitud que no cambió las cosas en su momento”, indicó.

En su papel como cantante argumenta tener el derecho y la obligación de llevar un mensaje de responsabilidad social sin utilizar la demagogia o el proselitismo. “Yo no tengo ningún partido político porque ese es México y no voto por nadie más que por el que más conviene a todos”.

El tenor mexicano no cree que una persona puede cambiar México ya que en su opinión el cambio debe nacer de la iniciativa de los seres humanos para demostrar de qué están hechos.

“La fuga del (narcotraficante) Chapo Guzman... ¡Qué cosa más humillante para los mexicanos! Hay que resolver que no vuelva a suceder y que las cárceles en México se conviertan en verdaderas prisiones, que sean castigo para quien lo merezca”, aseveró.

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