El vocalista del grupo Kinky, Gil Cerezo, no se sumó a las críticas en contra del disco unplugged de Pepe Aguilar. Por el contrario, señaló que el hijo de Flor Silvestre puede interpretar y tocar en cualquier estilo de la misma forma en que ellos proyectan en sus canciones la mexicanidad con el rock.
En entrevista con EL UNIVERSAL, destacó: “No por él tocar mariachi y que nosotros seamos rockeros no podemos expandir el abanico de opciones musicales a otros géneros”.
En una peculiar coincidencia, el unplugged de Pepe Aguilar coincide con el de Kinky. Al cuestionarle qué le parecía el álbum de Aguilar, Cerezo, dejó abierta la posibilidad de una colaboración: “Si se da la oportunidad con gusto lo haremos, hemos convivido y se nos hace un músico completo que podría tocar cualquier estilo”.
Asimismo, indicó que Kinky “le gusta proyectar la mexicanidad. Creo, es lo que hemos aportado con nuestra música; como grupo nos sentimos porque este unplugged, hace que se despierten otras inquietudes”.
Recordó que el reconocimiento actual de Kinky se debe a que empezaron tocando en cualquier espacio posible, festivales nacionales e internacionales y hasta en encuentros íntimos. Por eso de repente en Estados Unidos se le abrió espacio a su música en series y películas. “Gracias a estar tocando puertas se logró entrar a un mundo distinto”.
Se autocalificaron como una banda de brinco y baile, por lo que presentarse en el teatro Metropólitan este 5 de junio con su Kinky MTV Unplugged les da la solemnidad que necesitan para este proyecto.
Origen.
Con una producción que apela a sus raíces, gustos y costumbres que su ciudad les inculcó desde pequeños, la banda regiomontana Kinky se prepara para sorprender a sus fans con su show en vivo en el que emularán su MTV Unplugged aunque no tan desenchufado como se pensaría.
“Sí, sé que hay muchos cables para ser un unplugged, pero lo cierto es que somos una banda que se distingue por el uso de consolas y sintetizadores; por eso quisimos no dejarlo de lado en esta ocasión”, señaló Gil Cerezo.
Para esta gira que llegará a la ciudad de México el viernes la banda dividirá su espectáculo en dos partes, la primera con una pequeña pista de lo que hicieron en su reciente disco en vivo, mientras que la segunda será mucho más electrónica y estridente.
“El show lo hemos preparado desde octubre del año pasado, para él estuve viajando de Los Ángeles a México y buscamos tener en el concierto esa mezcla que hable de nuestro pasado y nuestro presente”, detalló Cerezo.
Para Gil, tal vez el mayor reto en esta producción —considerada por él como la más costosa que el grupo ha hecho— fue integrar en un mismo escenario a más de 22 artistas que a su vez supieran integrarse.
Durante el concierto Kinky integrará en el escenario géneros y propuestas tan diferentes como la electrónica y la banda, sin abandonar el acordeón y la mandolina