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Luis Miguel llegó a un acuerdo en la demanda presentada por su ex mánager que llevó a que el cantante fuera arrestado la semana pasada en Estados Unidos.
Los abogados de William Brockhaus, su ex mánager, aseguraron que, tras el fallo por un millón de dólares que obtuvieron contra el cantante, se había llegado a un convenio favorable.
El mexicano debía presentarse hoy en una corte federal en Los Ángeles para ser interrogado sobre sus finanzas y determinar cómo pagaría el adeudo. La página oficial de la corte quitó ayer la audiencia de su agenda.
Luis Miguel fue arrestado el 2 de mayo bajo una orden por desacato, después de que no se presentara en numerosas audiencias. Para salir, tuvo que firmar un documento en el que se comprometía a regresar.
Su abogado, Kris Demirjian, confirmó el acuerdo pero rechazó hacer cualquier comentario. También la abogada de Brockhaus, Amy B. Messigian, se negó a dar más detalles.
Larga historia de desacatos. El ex mánager demandó a Luis Miguel en Texas en 2014. Afirmó que el cantante mexicano no le pagó lo acordado en un contrato de representación de 2012 que ambos firmaron.
El Sol rechazó aceptar en varias ocasiones documentos que estaban relacionados con el caso y hasta la semana pasada no había registrado al abogado que lo representaría.
En julio de 2016, un juez federal de Nueva York ordenó que el mexicano le pagara a Brockhaus más de un millón de dólares.
Los abogados de Brockhaus buscaron la resolución del fallo en Los Ángeles, donde Luis Miguel es propietario de un inmueble. Otro juez ordenó que su Rolls Royce, modelo 2013, fuera confiscado durante el juicio.
