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cristina.pineda@eluniversal.com.mx
La meta de recaudación de esta edición del Teletón es de 327 millones 267 mil + 1 peso en el año número 20 desde su creación, con un terreno baldío en lo que ahora es el CRIT Estado de México. Los recuerdos y satisfacciones son varios para quienes han crecido junto con la iniciativa y los cientos de niños discapacitados y sus familias.
Así lo expresó Emilio Azcárraga Jean, presidente de Grupo Televisa, al inicio de la jornada el viernes.
“Es muy importante ver reflejados en todos los centros de rehabilitación, el centro de autismo y el hospital infantil de cáncer, el resultado del donativo de todos los mexicanos que está muy bien invertido y le ha cambiado la vida a cientos de miles de niños. Estoy convencido que es una labor donde se han unido todos los mexicanos para hacerle la vida mejor a los niños con discapacidad”, expresó el directivo.
Dijo que estaba orgulloso del reconocimiento que en otros países se le da a los centros de rehabilitación creados por Teletón.
“Los americanos se quedan impactados de la obra que se hace acá, de cómo se hace, la cantidad de horas que se le dedican, la manera en que están construidos, el equipamiento, la capacidad profesional de los rehabilitadores y es realmente un ejemplo a nivel mundial, el conjunto de centros de rehabilitación privado más importante del mundo y creo que son esas noticias que México necesita porque lo más bonito es que está construido por todos los mexicanos.
“El año pasado fue para rebasar las 600 mil visitas y que la gente tuviera oportunidad de ver en dónde estaba su dinero, ver cómo se hacen las rehabilitaciones, a los chavos y sus historias, de graduados que trabajan en la fundación, siento que lo que se debe de percibir es que es una fundación de todos”, apuntó Azcárraga.
Por su parte, Fernando Landeros, presidente de la Fundación Teletón, se mostró satisfecho como cada año: “Esto era un terreno baldío y no significaba nada para nadie, hoy significa tanto para miles. Estamos arrancando una larga jornada pero que va a valer mucho la pena. Me siento lleno de seguridad y el amor de un país.
“Servir a estos niños es el mayor privilegio de la vida. Son niños que están llenos de Dios”.
La batalla, dice, es dura pero asegura que “la donación es la solución” y eso es lo que ha hecho posible muchos sueños, darle a los niños la estabilidad de que su centro de rehabilitación seguirá abierto y que despierten sin angustia, eso es lo que también espera lograr con el dinero recaudado. Por eso afirma: “Si algo hemos aprendido de los niños es que lo único que no podemos decir es no puedo. No hay acción más importante que la obra como tal”.
