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Para Dorle Klokow parece que fue ayer la partida de su esposo Raúl Velasco, quien cumplió 10 años de fallecido el pasado 26 de noviembre, motivo por el cual se realizó una misa la noche del lunes en la iglesia de San Agustín.
“Este cariño perdura. Todavía no puedo ver videos o fotos de mi esposo porque tengo que estar lista emocionalmente para disfrutarlo y no sentirlo, todavía es como agridulce”, dijo Dorle, quien compartió la vida con el conductor hasta el momento de su muerte en 2006.
Pese a que fue un hacedor de estrellas, pocos fueron los artistas que acudieron a la misa, sólo estuvieron presentes Maribel Guardia, Pati Chapoy, Luis de Llano y Rebecca de Alba. “Don Raúl lo máximo que ha existido. Muchos me han preguntado si fue difícil entrar al medio artístico, la verdad yo venía con los mismos valores que me transmitía don Raúl y toda su familia, entonces para mí fue increíble encontrarme que era además de mentor, amigo, jefe, un profesional serio y exigente, él me formó y yo le respondí”, dijo la conductora Rebecca de Alba, quien es considerada como un miembro más de la familia Velasco.
Acompañada de su hijo Julián Figueroa y su esposo Marco Chacón, Maribel Guardia hizo acto de presencia en esta ceremonia. “Fue el hombre más importante en la música, las carreras de los artistas no se podían hacer si no era con su beneplácito y yo lo recuerdo con un gran cariño, a mí me dio una gran oportunidad, creo que todos los que estábamos en la música en esa época tenemos que agradecerle al señor Velasco”.
Comenzada la eucaristía, la comunicadora Pati Chapoy y su esposo Álvaro Dávila llegaron discretamente y se sentaron en una de las últimas bancas del templo, donde permanecieron hasta poco antes de terminar la ceremonia.
Dorle, Karina, Claudia y Arturo estaban al frente de la congregación en primera fila, mientras al centro a unos pasos del altar se encontraba un fotografía del conductor, el cirio pascual y un arreglo de rosas lo acompañaban.
En la homilía el sacerdote habló sobre sus orígenes en Celaya, Guanajuato, donde trabajó en una tienda llama La Violeta, de contador y hasta de chofer de una pipa, sobre cómo tuvo que dejar casa y familia para venir a la Ciudad de México, hasta sus inicios en el Telesistema Mexicano, donde en la década de los 60 inició un programa llamado Siempre en domingo, también abordó su labor altruista y la difusión que hizo de la cultura mexicana por el mundo, según sus palabras, movido por su fe cristiana.
En la misa también se mencionó a otros difuntos como Jacobo, Joan Sebastian, Alberto Aguilera, Leopoldo Meraz, Rocío Jurado y Rocío Durcal, entre otros.
“Hay veces que digo: son 10 años, qué rápido se pasan, pero yo creo que cuando alguien está tan cerca de tu corazón, el tiempo y el espacio ya no toma tanto valor”, expresó Karina Velasco.
Arturo Velasco explicó que el espacio que su padre creó con Siempre en domingo es totalmente suyo, por eso no ha surgido otro programa con el mismo éxito, además de que la televisión y sus contenidos han cambiado.
