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La casa de Chris Brown en Los Ángeles, California, amaneció ayer rodeada de policías que armaron un operativo en atención a una llamada de emergencia en el 911.
Durante la mañana, el cantante (recordado por el episodio de violencia contra Rihanna cuando eran novios) se negó a salir del domicilio y retó a la policía.
El portal TMZ consignó incluso que Brown arrojó por la ventana una mochila a escondidas de los elementos policíacos.
Al mediodía, el abogado del cantante llegó a la casa y entró. Minutos después se permitió la entrada de los policías quienes catearon el lugar, con Brown dentro. “Encontraron una pistola, otras armas y varias drogas”, informó TMZ.
Pero después de la investigación, Chris salió al patio de la casa junto con los oficiales y platicando con tranquilidad. No fue arrestado y volvió a entrar a su domicilio mientras las patrullas se iban.
Más tarde, la modelo Baylee Curran ofreció una entrevista en la que contó detalles de la historia. Ella asegura que estuvo de fiesta en la casa de Chris Brown el lunes.
En la madrugada de ayer, mientras paseaba por algunas zonas de la residencia, se encontró con una escena singular: un colaborador de Brown estaba inspeccionando algunas joyas. Ella se detuvo a apreciarlas y entonces algunos guardias de seguridad comenzaron a amenazarla. El escándalo atrajó al cantante, quien le apuntó a la cabeza con una pistola. Fue entonces que ella llamó al 911.
