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Londres.— “Es imposible complacer a todo el mundo, pero a mucha gente le va a gustar la película”. Así de tranquila y segura se mostró la actriz Melissa McCarthy en una entrevista en la que habló de los comentarios machistas y racistas que ha recibido la cinta que protagoniza, Ghostbusters.
La nueva versión de este clásico de los años 80, que llega a los cines españoles el 12 de agosto y que encabezan cuatro mujeres comediantes estadounidenses, recibió una avalancha de duras críticas y hasta de insultos hacia las intérpretes, desde el estreno del tráiler el pasado marzo.
McCarthy, de 45 años y nominada al Oscar por su papel en Bridesmaids (2011), apartó un momento su sarcástico humor y sacó toda su artillería para defender y poner en valor el trabajo que han realizado: “Estamos orgullosas de la cinta, pusimos todo nuestro amor en ella y nos reímos mucho rodándola”.
A su lado se encontraba Kristen Wiig, de 42 años, otra cazafantasmas y estrella durante ocho años del laureado Saturday Night Live, que con estoicidad y una amable sonrisa se dirigió a quienes están contra el filme por estar protagonizado por mujeres en lugar de hombres, como ocurría en el largometraje original, que contaba con pesos pesados como Bill Murray.
“Por Dios, que vean la película antes (de juzgar), aunque incluso así la gente seguiría hablando. Afortunadamente nosotras hemos visto la película y estamos contentas con el resultado”, afirmó la también intérprete de Bridesmaids y de The Martian.
Las otras dos valientes que se enfundan el uniforme gris y salen a la caza de espectros son Kate McKinnon y Leslie Jones, que tuvo que aguantar el linchamiento en las redes sociales de usuarios que acusan a la cinta de racismo porque su personaje, el único negro, no tiene formación como científico, sino que trabaja en una estación de tren.
“Somos cuatro mujeres comediantes profesionales, no damos nunca un paso atrás, nos ayudamos mutuamente y eso es algo llamativo”, afirmó McKinnon sobre las críticas.