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Integrantes de la música regional mexicana siguen siendo víctimas de hechos violentos. Según Larry Hernández es algo que siempre ha sido así y que seguramente seguirá siendo, aunque gracias a las redes sociales y a los teléfonos inteligentes se hace más público hoy en día.
Para el intérprete de temas como “El baleado” y el corrido “El chapito Guzmán” la razón es porque a la gente que le cantan son personas que se quieren ir a poner “happy” con sus canciones y sus shows.
“Eso hace que se pase un poco de la raya, porque no le estamos cantando a un diputado o a un empresario… son gente común, comerciantes, empleados y uno no puede controlar al pueblo cuando se emociona; a mí me encanta, porque es la adrenalina que hay en un palenque”, comentó vía telefónica desde Los Ángeles.
El cantante aseguró que tener una presentación en un palenque es algo peligroso, pero que a él particularmente le gusta la adrenalina. Sin embargo, asegura que ellos no pueden controlar quiénes acuden a sus shows.
“Nosotros no sabemos quién está pagando la primera rueda del palenque, y no sabemos si es alguien que está enredado en la mafia. ¿Qué vamos a hacer? Esa es la diferencia entre los otros cantantes y nosotros.
“Por eso hemos tenido golpes de mala suerte que desgraciadamente han desaparecido a personas como Valentín Elizalde y que también le han pasado a Alan (de la MS) ahora en la Ciudad de México; ojalá que sea algo que a alguien le tocó mala suerte, pero creo que siempre va a ser así, nada más que ahora las redes sociales, los teléfonos inteligentes lo hacen más público, pero creo que los artistas poperos, reggaetoneros también han tenido sus problemas no nada más nosotros”.
En octubre del año pasado Larry Hernández estuvo en la cárcel por una demanda de supuesto secuestro a un empresario. El proceso legal aún es vigente y es algo que no tiene temor en mostrar en su reality show Larrymanía que produce NBC Universo y que estrena su quinta temporada el 17 de julio a las 21:00 horas.
“Si trabajamos en un palenque, nosotros no vamos a ser como otros artistas, que van a cantar canciones para dormir; las canciones de nosotros son de esas que te emocionan más, que te hacen tomar y eso hace que la gente ofenda al mismo artista y que él se enganche con alguien que esté tomado. A veces la situación hace que se ofendan los dos. Ahora yo ya no estoy tomando, pero en su momento sí dio a pie que me peleara con alguna persona que me ofendía. Yo siempre he sido así, si algún día, ya sea una mujer o un hombre, siempre me voy a defender. No porque sea una persona pública voy a dejar que falten al respeto a mis hijas, hijos, o a mi madre”.
Según el grupero, a él siempre le ha ido bien y el boom del regional mexicano también tiene que ver con la atención que han recibido otros cantantes que están metidos en problemas, pero que el género es uno de los que venden más discos.
Además del reciente incidente de Alan, integrante de la Banda MS, en el pasado Lupillo Rivera recordó que sufrió un intento de secuestro.
Valentín Elizalde fue asesinado en 2006 después de haber ofrecido un palenque en Reynosa, Tamaulipas.
Sergio Gómez, fundador de K-Paz de la Sierra, fue asesinado en 2007 a los 34 años. Según cifras, de 1999 a septiembre de 2012 habían sido asesinados 44 gruperos. Fue 2007 el año más sangriento, con 11 artistas muertos.