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La actriz y modelo Emily Ratajkowski ha causado revuelo de nueva cuenta. Esta vez fue para una sesión al desnudo, sí, pero también por el contenido de la entrevista publicada en Harper’s Bazaar.
La joven de 25 años posó sin ropa y montando a caballo para la fotógrafa Mona Kuhn y fue entrevistada por la reconocida feminista Naomi Wolf, con quien dialogó sobre la libertad con que expresa su sexualidad y muestra su cuerpo.
Ahí reveló que entró “a la pubertad antes que todos (los chicos de su edad). Y era más sexual que mis compañeros de clase”.
Ratajkowski declaró que fue firmada por una agencia de modelos y comenzó su carrera sobre las pasarelas desde muy temprano, a los 14 años, porque entonces “lucía exactamente igual que luzco ahora. Ellos nos sabían que hacer. Lucía como una mujer”.
También dijo que su aspecto entonces le dificultó su ingreso a la televisión. Recuerda que hizo audiciones para papeles estelares en Disney y para la emisión ICarly, de Nickelodeon, pero en ambas oportunidades fue rechazada “porque había arquetipos de chicas preadolescentes que esos programas requerían”.
Cuando Wolf le preguntó sobre cómo elige qué publicar en las redes sociales día a día, la británica aprovechó para hablar sobre Kim Kardashian y defender la manera en la que expresa su sexualidad en internet.
“El pensamiento en general cuando Kim se toma una selfi desnuda es que ella solamente busca atención. Pero ese no es el problema. Una mujer puede buscar atención pero también hacer un pronunciamiento. Ambas (ideas) no necesitan ser excluyentes una con la otra”, dijo.
Recordó que la fotografía topless que se tomó junto con la socialité en marzo pasado “fue muy intencionada, muy directa”. Relató que antes de la sesión no la conocía personalmente pero le sorprendieron las críticas severas de las que fue objeto por publicar una imagen al desnudo más temprano ese mismo mes.
Ratajkowski recordó que el conductor Piers Morgan declaró con indignación: “ella es madre, tiene 35 años, es ridículo (que se desnude)”. Ante la reacción de Morgan, Emily declaró que se sintió molesta y “entonces publiqué un par de tuits (en su defensa); ella me envió flores agradeciéndome, lo cual fue muy dulce. Entonces terminamos encontrándonos y tuvimos esta idea de tomar una selfi similar con el dedo medio levantado”.
“Es padre tener este formato en el cual puedes ser tan directa con la audiencia. Las redes sociales son algo que las mujeres no tenían hace 10 años y es un gran aspecto del feminismo de hoy en día. No tengo que ser censurada por nadie. Yo elijo”, concluyó.
Ayer el propio Piers Morgan se volvió a hacer presente en la discusión con un tuit: "¿Quieres que te compre algo de ropa? Luces friolenta”. Pero, ni tarde ni perezosa, la modelo respondió: “Gracias, pero no necesito ropa tanto como tú necesitas prensa”.
rqm
