Farándula

Glamour y tradición convergen en fiesta

María Mercedes y María Telón acapararon fotos a su paso por la alfombra roja

El director Jayro Bustamante (al centro) junto al equipo de la película 'Ixcanul' (JUAN IGNACIO MAZZONI. EFE)
25/07/2016 |00:35
Redacción El Universal
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julio.quijano@eluniversal.com.mx

Punta del Este.— María Mercedes Coroy lleva huipil. María Telón, blusa y falda. Las luces y los rayos láser de la discoteca hacen destellar los colores de sus trajes típicos guatemaltecas. La fiesta previa de los Premios Platino se realizó en el OVO, la disco más exclusiva de Punta del Este, el destino más exclusivo de Uruguay. El impacto que provoca la presencia de las Marías, protagonistas de la película Ixcanul y ganadoras del Premio del Público, es el de un choque cultural.

En la ficción sus personajes están separados de la modernidad por el volcán. En la fiesta previa se convirtieron en las más solicitadas para las selfies.

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Hay que decir, por cierto, que en esta edición de los Platino el glamour fue duro y constantemente golpeteado por el invierno austral. Punta del Este es en esta época (como cada año) un pueblo casi deshabitado y los pocos turistas (uruguayos y extranjeros) que se atreven a vacacionar lo hacen con chamarras en vez de trajes de baño.

La alfombra roja, por tanto, fue planeada al interior del Centro de Convenciones de Punta del Este, construcción que apenas fue entregada la semana pasada al gobierno de Uruguay.

Una vez dentro, el panorama fue distinto. Actrices, productores, actores y directores se quitaron los abrigos. Rigoberta Menchú, premio Nobel de la Paz, desfiló para insistir en su mensaje del cine como propagador de los valores mientras que el cantante Pipe Bueno provocaba suspiros.

Coincidieron en la alfombra dos mexicanos que trabajan el Hollywood: la directora Patricia Riggen (que regresará a México para filmar un cortometraje sobre el machismo) y el actor Diego Boneta (que anunció que trabajará en un proyecto de ciencia ficción).

Fue además, una pasarela que reunió en 50 metros los extremos del entretenimientos iberoamericano: entre los últimos en desfilar estuvo Antonio Bolívar, indígena ocaina que apareció con su penacho pluricolor como parte del elenco de El abrazo de la serpiente; y en seguida, corriendo y sudando, Paulina Rubio, quien anunció que en pocos días estará en México para presentar su nuevo disco.