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Pocas personas en la industria del entretenimiento pueden jactarse de llevar medio siglo en Hollywood con apenas 53 años de vida.

Una de ellas es Jodie Foster, quien ha pasado de ser un símbolo sexual en su adolescencia a figurar como una actriz reconocida y respetada en la Meca del Cine. No conforme con eso, confrontó hace unos años a la industria al dar a conocer de manera abierta su orientación sexual.

En esa etapa anunció también que paulatinamente dejaría de actuar, ya que su interés ahora está enfocado en dirigir. Años atrás ya había hecho sus primeros trabajos al frente de filmes como El pequeño Tate o Mi otro yo (en la que además actuó).

En esta nueva etapa, también optó por dirigir proyectos para televisión como algunos episodios de Orange is the new black o House of cards.

Ahora a sus casi 54 años y tras recibir esta semana su estrella en el Paseo de la Fama, la angelina vuelve a la dirección con el filme Money monster (“El maestro del dinero”), cinta que estrenará en México el 17 de junio.

Es un largometraje en el que además de reunir a dos de sus más grandes ídolos del cine, George Clooney y Julia Roberts, toca un tema que la ahora directora considera relevante: el poder que las celebridades pueden ejercer sobre el público y la manipulación de la que pueden ser objeto millones de personas por estar desinformadas.

“Socialmente hablando, este tema es relevante para mí, porque es relevante para mi vida. Es una película de suspenso, emocionante, con un ritmo rápido, creo que es la película con el mejor ritmo que he hecho.

“Reúne a diferentes personas en una especie de tapiz, (se ve) la totalidad de sus motivaciones y toda una idea que rodea al dinero y la fama, y cómo pensamos que el dinero le da sentido a nuestra vida, es la manera en la que nos percibimos, en base a cuanto poseemos”, dice Foster.

En el filme, Lee Gates (Clooney, quien además es productor de la película) es una personalidad televisiva, un famoso y grandilocuente presentador de un programa financiero.

Gracias a la información privilegiada que tiene en su poder, se convierte en un gurú de Wall Street.

Las cosas salen mal cuando Gates recomienda a sus espectadores invertir en acciones tecnológicas de alto riesgo, las cuales misteriosamente se derrumban en la bolsa.

“La influencia que las personalidades tienen sobre la gente es el gran problema; creo que en nuestro mundo y en el mundo financiero, es algo que la mayoría vemos como una cosa misteriosa que nunca podríamos entender, por eso hay mucha gente que nos defrauda, nos quita lo que tenemos, porque realmente no tenemos el conocimiento, quizá si supiéramos más acerca de otros temas, algunas personas no abusarían”, explicó.

A su edad, Jodie sabe que lo que le interesa de cualquier proyecto es la historia , así no tenga el dinero suficiente para hacer una gran producción, pues mientras tenga a los guionistas y actores indicados, todo saldrá bien.

“Siempre he hecho mis películas en poco tiempo, porque nunca he tenido el dinero suficiente para hacerlo de otra manera. Creo que esa es la razón por la que también hago tv. Me gusta ser clara acerca de lo que estoy buscando contar y si puede ser en el menor número de pasos, mejor. La televisión me lo ha permitido. Me gusta la claridad a la hora de contar algo”, añadió.

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