Pese a que la variedad de géneros musicales se hizo presente durante la noche de los premios Billboard, si algo destacó fue el protagonismo del blanco y el negro durante la alfombra roja en la mayoría de los asistentes que desfilaron anoche en Miami.
La sobriedad era el elemento clave en la vestimenta, y aunque se trataba de una noche llena de energía, los invitados optaron por usar distintos accesorios que hacían resaltar sus figuras y personalidades.
Paulina Rubio, pese a tener poco tiempo de haber dado a luz, deslumbró por usar un entallado vestido negro con cortes asimétricos que le llegaba hasta las rodillas con unos cordones que pronunciaban aún más su escote. Con sus características pulseras, La Chica Dorada se prestó a sonreír durante su paso donde estuvo acompaña por su pareja, Gerardo Bazúa.
Otra cantante que quiso aplicar el mismo efecto en su imagen fue Lucero, quien asistió recargada de accesorios entre pulseras, aretes y anillos, sin dejar de lado las trenzas en su peinado.
El dúo pop Jesse & Joy contrastó en sus arreglos, ya que mientras Joy utilizó un vestido ceñido color marfil confeccionado por el diseñador oriundo de Morelos, Benito Santos, que dejaba ver en ella una figura más delgada, su hermano Jesse optó por un negro total, anillos en ambas manos y una chamarra de piel que le dieron un estilo rockero.
Marc Anthony apostó por un look más casual usando un blazer hueso, camisa blanca, pantalón de mezclilla y mocasines.
Los cantantes Juanes y Marco Antonio Solís eligieron combinar el negro en sus pantalones; mientras el primero usó una chamarra en tono gris de estilo militar, El Buki fue más elegante con un saco azul marino, corbata y gafas obscuras.