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Chile.— El productor musical Dr. Luke se refirió por primera vez a la polémica que enfrenta luego de que la cantante Kesha lo acusara de abuso sexual.
“No violé a Kesha y nunca he tenido sexo con ella. Kesha y yo fuimos amigos muchos años y ella era como mi hermana pequeña”, escribió en su cuenta de Twitter.
Aseguró que escribió muchas canciones con Kesha y que hubo algunas diferencias creativas entre ambos.
Parece que también se refirió al hecho de Taylor Swift, quien le donó 250 mil dólares a Kesha, pues esta última asegura no tiene dinero para seguir con el proceso legal.
“Entiendo por qué la gente sin toda la información está hablando. Puedo comprender su compasión”.
Dr. Luke publicó una imagen tomada de TMZ, de documentos oficiales, en donde Kesha niega que el productor la haya drogado o tenido una relación íntima con él.
La historia. ¿Pero por qué Kesha está empecinada en dejar de trabajar con el hombre que la descubrió y que ha producido los mayores hits de su carrera, además de sus dos álbumes a la fecha?
La historia se remonta a octubre de 2014, cuando la artista interpuso una demanda en contra de Dr. Luke en la que reveló los presuntos abusos a los que fue sometida por parte de él desde que en 2005 la convenció de dejar la escuela en su natal Nashville para firmar con el sello Kemosabe, propiedad del productor y filial de Sony.
La cantante lo acusaba de haber manipulado su vida a lo largo de 10 años, explotarla, maltratarla, acosarla y, en una ocasión, de violarla luego de haberla drogado. De acuerdo con su versión, médicos le habían advertido que seguir trabajando con su “victimario” implicaba un riesgo a su salud física y mental, por lo que, como medida reparatoria, Kesha exigía deshacer el contrato que la obligaba a colaborar con él en cada uno de sus próximos álbumes.
Casi un año y medio después, con la carrera de la artista en un punto muerto por no haber podido trabajar con ningún otro sello o productor, la justicia dio su veredicto y desestimó las acusaciones de Kesha. “Sin evidencia médica de los abusos, no tengo por qué dar curso a este requerimiento”, dijo el viernes la jueza Kornreich, quien además usó un argumento de la defensa de Dr. Luke para enterrar las aspiraciones de la cantante.
“Él está dispuesto a dejar que grabes música sin su participación, por lo que tu exigencia no tiene sustento”, le enrostró.
Y ayer los abogados del productor tomaron la ofensiva: “Con sus mentiras, Kesha y su círculo quieren lapidar a Dr. Luke a través de Twitter para arruinar su reputación y conseguir ganancias, sin poder probar ninguna acusación”.
Kesha, por su parte, argumenta que nunca denunció los abusos porque Dr. Luke la tenía amenazada con arruinar su vida y la de su familia si los revelaba. Además, sostiene que si bien tiene la posibilidad de grabar con Sony un disco sin el productor, siente que no recibirá de ellos el apoyo que tendría en una nueva casa discográfica.
Por lo pronto, Kesha se refugia en el cariño de sus fans y en el transversal respaldo que le han entregado sus pares, varias de las cuales han hecho notar la injusticia de género que implica el caso. La demanda aún no está del todo resuelta —también hay una contrademanda del acusado—, por lo que la cantante aún tiene batallas que librar si quiere conseguir el que, de acuerdo con sus abogados, es su único propósito: grabar con un sello que no esté asociado a alguien que habría abusado sexual y emocionalmente de ella.
La controversia, eso sí, recién comienza, pues Dr. Luke ya sacó la voz.
Con información de Redacción