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Ni Roberto Gómez Fernández ni sus hermanas Paulina y Marcela asistieron a la misa con la que se conmemoró el primer aniversario luctuoso de Roberto Gómez Bolaños. “Cada quien vive su duelo de distintas maneras”, declaró la viuda del comediante, Florinda Meza, al referirse a la ausencia de los familiares en el Panteón Francés, que estuvo abierto al público y la prensa para la celebración.
Luego de que algunos camarógrafos tiraran un florero, así como una cruz dispuesta en el lugar donde el padre Eduardo Linares ofició la misa, Florinda Meza, un tanto disgustada, dijo perdonar a los que ocasionaron este daño y que ella pagaría a la iglesia por los desperfectos.
La también actriz refirió que a su esposo le daría “una gran tristeza ver este suceso”. Pero como él siempre perdonaba, ella ahora lo hacía también.
Sobre la ausencia de los hijos de Chespirito, declaró: “No están aquí porque cada uno tenemos una forma muy distinta de llevar nuestro pesar, nuestro dolor, nuestra pena y forma de superarla. Miren, cuando Roberto falleció, yo sentía como que esto no me estaba pasando a mí, como que era una pesadilla de la cual me iba a despertar en algún momento”. Agregó: “Al final a no todos pasamos por lo mismo, por este dolor de que cada día es peor que el anterior, que cada día la ausencia más grande, cada día lo extraña uno más.
“Entonces (con la conmemoriación a un año de la muerte) está pasando lo mismo: ellos están viviendo su duelo como lo saben vivir, cada quien lleva su duelo de manera diferente, por eso no están aquí. Me mandaron un saludo, me mandaron su corazón y, si estuvieran aquí, estarían diciendo esto, hay gente que no sabe aguantar el llanto... yo apenas si he podido, pero tampoco me gusta que me vean llorar, entonces hay que comprenderlos también”, señaló Florinda Meza.
Expresó: “Mi corazón está con ellos también porque son la genética de mi Robert; con verlos, con tocarlos, con acariciarlos es como si lo hiciera con mi Robert, porque es lo que queda de él, son sus hijos”, externó con la voz entrecortada.
En este primer aniversario luctuoso de Roberto Gómez Bolaños sólo unos 50 fans del artista, así como su viuda Florinda Meza, los actores Benny Ibarra y Miguel Palmer, y la directora de Televisa Consumer Products, Maca Roter, asistieron a la misa oficiada en el Antiguo Panteón Francés.
El sacerdote elogió la pluma de Chespirito y se dijo también fan desde que tenía 10 años de edad. Además lo comparó con Shakespeare por su genialidad para escribir para el grueso de la población, con un humor sano y blanco a través del cual difundió el amor al prójimo con sus programas El Chavo del 8 y, el que al sacerdote le gustaba ver, El chapulín colorado, con el cual se entretenía de niño.
Entre sus fans destacó un joven que vino desde Brasil, Fabiano Hoffman. Dijo que hizo el viaje pensando en acompañar a los deudos de Chespirito “en este trance amargo que dejó al mundo sin su humor”.
