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El médico que atendió a Luis Miguel después de que cancelara dos conciertos en México la semana pasada, Ramón Pardo, negó que el cantante haya estado bajo la influencia de drogas.
“No hubo ningún síntoma que sugiera el uso de estas sustancias”, dijo en entrevista con la prensa mexicana.
El doctor reiteró que se le diagnosticó una rinofaringitis aguda, la cual, recordó, es un proceso inflamatorio de la vía aérea superior que produce síntomas que pueden “disminuir el rendimiento” de “un profesional de la voz”.
“Es multifactorial, (se debe a) cambios bruscos de temperatura, aire acondicionado, contagio de persona a persona”, indicó.
Pardo contó que le recetó antiinflamatorios, descongestionantes y analgésicos y le recomendó reposo para curar la enfermedad.
Además de la rinofaringitis, Luis Miguel también padece de una enfermedad auditiva.
Los representantes del cantante confirmaron que los próximos conciertos siguen en pie.
El cantante mexicano seguirá adelante con sus presentaciones de la gira “Deja Vú”, pues en un comunicado de prensa se confirmaron sus shows del 25, 27 y 28 de noviembre en Argentina.
Hace unos días el intérprete levantó gran revuelo, luego de cancelar sus conciertos en el Auditorio Nacional.
Los dos primeros fueron suspendidos cuando apenas habían transcurrido unos minutos y ante los severos problemas que presentaba para cantar.
En una entrevista para el periódico El Clarín de Argentina, Luis Miguel habló del problema auditivo que padece y aseguró que se encuentra mucho mejor gracias a un tratamiento.
