Teniendo en cuenta que es la hija de Kurt Cobain y Courtney Love, Frances Bean siempre fue una joven que supo cultivar un bajo perfil. Por lo tanto, al momento de casarse con su novio de hace dos años, Isaiah Silva, Frances siguió por el mismo camino de la privacidad y realizó una ceremonia secreta con tan solo quince invitados. ¿Qué fue lo extraño? Que entre esos invitados no estaba su madre Courtney.
Si bien recientemente se las pudo ver juntas en una alfombra roja, Frances mantiene una relación muy tumultuosa con Love y por eso optó por celebrar una boda estrictamente con sus amigos.