A ocho días de haber dejado la sala de terapia intensiva, el actor se encuentra muy restablecido de salud, alerta y con muy buen ánimo, según palabras de su esposa Maribel Robles, quien comentó que incluso ya comenzó a recibir visitas de amigos y familiares.

“Va súper bien, muy reactivo, está ya con ganas de hablar aunque todavía balbucea, pero está muy bien incluso con lo del edema cerebral, está bajando mucho, está sonriendo, dándonos besos, los riñones 'jalaron' al 100% sin necesidad de diálisis, el corazón trabajó muy bien sin necesidad de marcapasos, los pulmones perfectos, todo increíble la verdad”, dijo Maribel Robles.

Incluso señaló que su esposo se encuentra mucho más conectado con lo que pasa a su alrededor, que antes de ingresar al hospital hace casi tres semanas por una falla renal, “ahorita puede estar dos o tres horas reaccionando a lo que uno le dice, contestando con la cabeza, en fin muy bien”.

Sobre los avances que había tenido con las secuelas de su accidente vascular que le provocó una hemiplejia (parálisis del cuerpo), de las cuales ya había recuperado el movimiento de su mano y pierna, debido al tiempo que estuvo sedado se dio un pequeño retroceso al disminuir el domino que ya tenía en esas extremidades, por lo que ha tenido que reiniciar con sus terapias de rehabilitación.

rqm

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