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cesar.huerta@eluniversal.com.mx
Por años su cine ha enfrentado a la maquinaria hollywoodense, pero eso no le impide a Arturo Ripstein aceptar la invitación que le ha hecho la Academia de Cine de EU, que anualmente otorga el premio Oscar.
Ayer, el realizador mexicano de El castillo de la pureza y El lugar sin límites formó parte de los más de 700 creadores a nivel mundial que han sido reclamados por dicho organismo, para integrar sus filas.
Además de Ripstein también fue invitado el cineasta mexicano Amat Escalante (Heli) y el chileno Alejandro Jodorowsky (El topo); los actores Mónica Belluci (Irreversible, de Italia), Edgar Ramírez (Punto de quiebre, de Venezuela), Gal Gadot (La mujer maravilla, de Israel) y Vigo Mortensen (El señor de los anillos).
“Es muy grato que de pronto a uno le ocurra esa invitación, es completamente inesperado porque de pronto a uno lo invitan sin haber sugerido o pedido, es grato, sin duda, es quizá el reconocimiento a tantos años de trabajo”, consideró vía telefónica.
“Aceptaré y votaré”, agregó el realizador de 73 años, ganador en festivales como los de La Habana, San Sebastián y Sundance.
Ripstein no olvida, a pregunta expresa, que ha sido el cine estadounidense un problema para la exhibición del cine mexicano en salas.
“Sabemos cuáles son los problemas del cine, la hegemonía (de ellos) no permite que nosotros estemos con cierto trato; Estados Unidos ha inventado no sólo que hacen el mejor cine posible, que está lejos de la realidad, sino también el único.
“Cuando era joven era llamadao eso penetración cultural, por cuestiones políticas, ahora se llama libre mercado y que de pronto inviten termina siendo un halago”, comentó vía telefónica a EL UNIVERSAL.
Ripstein y Escalante se suman a los actores Silvia Pinal e Ignacio López Tarso, los realizadores Carlos Carrera (El crimen del padre Amaro), Carlos Reygadas (Luz silenciosa) y Patricia Riggen (La misma luna) invitados en 2016 a ser académicos.
López Tarso (Macario y El hombre de papel) reveló recientemente a El Gran Diario de México que él ha decidido no ejercer su derecho al voto por la estatuilla del Oscar.
“Pertenezco a la Academia, pero puedes decidir si votar o no, yo opté por no votar”, subrayó.
La más reciente película de Ripstein, El callejón de la amargura, se estrenó mundialmente en el marco del Festival Internacional de Cine de Venecia 2015, llegando a salas nacionales a finales del año pasado.
Basada en el caso real de dos mini luchadores asesinados por sexoservidoras en la Ciudad de México, la cinta fue difundida también por la plataforma digital de Filmin Latino.
“Un nuevo proyecto está lentamente surgiendo, esta opción siempre es gratificante”, expresa Ripstein.
