Más Información
Oposición se lanza contra extinción de órganos y elección judicial; diputada de MC llama a interponer controversia constitucional
Diputados avalan súper secretaría de García Harfuch; SSPC investigará delitos y coordinará inteligencia a nivel nacional
Con prórroga o sin ella, elección judicial va, asegura Taddei; afirma que presupuesto de 13 mmdp no es ninguna “ocurrencia”
Así fingió “El Guacho” su muerte para vivir en Estados Unidos; su esposa es hija de “El Mencho”, líder del CJNG
INE aprueba calendario y programa de trabajo para elección judicial; hay un retraso del 15% en actividades
Envuelta en una alfombra y con el rostro quemado, así fue como trasladaron al hospital de la ANDA a la actriz Carmen Montejo cuando sufrió el accidente que casi le desfigura el rostro.
María Teresa Sánchez González
, mejor conocida como Carmen Montejo fue una de las actrices emblemáticas de la Época de Oro del Cine Mexicano , gozó de éxito y luchó contra el alcoholismo cuando éste ensombreció su vida.
Carmen nació el 26 de mayo de 1925 en La Habana Cuba, inició su carrera artística cantando y bailando a los seis años en el programa radiofónico "Abuelita Cata", su simpatía y rasgos físicos hicieron que la compararan con una muñeca del sololoy, por lo que la apodaron "Muñeca Sánchez.
Estudió teatro y actuación en la Universidad de La Habana, en su país incursionó en las radionovelas, actividad que desarrolló de manera muy profesional y por la que Emilio Azcarraga Vidaurreta le ofrecería en México un estelar en "El diario de Susana Galván".
La radio fue un trampolín que la llevó a participar en su primer película "Resurrección" y posteriormente en "No matarás" (1943) junto a Sara García.
Su consagración como actriz llegó con su primer protagónico en 1943 con "El camino de los gatos", y cómo olvidar su actuación como Yolanda "La tísica" en "Nosotros los pobres" (1948).
Su calidad histriónica se inmortalizó en cintas como "La señora de enfrente" (1945), "Al caer la tarde", "Mujer sin mañana" (1949), "¿Qué te ha dado esa mujer?" (1952), "Acuérdate de vivir" (1953), "El vampiro" (1957) y “Doña Macabra" (1972).
A la par del cine, Carmen también se desarrolló en teatro, en 1967 encarnó a una mujer alcohólica en "Quién teme a Virginia Woolf", se metió tanto en este personaje que incluso seguía bebiendo después de haberla interpretado en el escenario.
Esto se conjugó con una depresión por la muerte de su madre y por haber perdido todos sus bienes en Cuba, cuando entró como presidente Fidel Castro.
Jesús Ibarra, biógrafo de Carmen Montejo, y María Montejo, única hija de la actriz, contaron un episodio de la vida de Carmen en el que el alcoholismo casi le provoca la muerte.
Resulta que en una reunión en la que estaba Raquel Olmedo y Christina Muñoz, Carmen se metió al baño, bebió un trago de alcohol puro y luego encendió un cigarro, las consecuencias casi fueron fatales.
Raquel Olmedo fue quien la salvó, la sacó del baño para llevarla al hospital de la ANDA donde le atendieron quemaduras en el rostro y la mano.
Ibarra narra que fue Rosario Galves, esposa de Luis Aguilar quien le recomendó entrar a alcohólicos anónimos, lo que le ayudó a dejar de manera definitiva esta adicción.
Christina Muñoz, gran amiga de Carmen Montejo durante 50 años, fue la mujer que la acompañó en su lucha por dejar el alcohol y el cigarro.
Carmen se mantuvo alejada de las cintas eróticas, y rechazó las propuestas que le hicieron para que participara en el llamado “cine de ficheras”, sin embargo, en 1974, el director Luis Alcoriza mostró sin su autorización, su torso desnudo en la cinta "Presagio", situación que decepcionó profundamente a la actriz.
Tras librar una batalla contra el cáncer de mama en 2002, Carmen tomó previsiones y alistó su testamento, así como la tumba con su nombre grabado en ella.
Carmen Montejo falleció la mañana del 25 de febrero de 2013, recibió un homenaje de cuerpo presente en el lobby del Palacio de Bellas Artes y fue sepultada en el Panteón Jardín.
Lo que México le quitó:
En México, no fue llamada por su nombre ni como "Muñeca Sánchez", sino como Carmen Montejo; el director Chano Urueta le recomendó pensar en un nombre artístico, por lo que Carmen escogió el apellido Montejo, pues cuando llegó a México quedó enamorada del Paseo Montejo en Mérida Yucatán.
rad